Leyendo en El Chofre a Toni, su viajecito a la presentación de los Carteles de la Feria de Parentis, no he podido por menos que sentir que la envidia me invadía pensando en la de kilometros que tenemos que hacer los aficionados extremeños si queremos ver Toros con Casta y Trapío, Madrid, algo de Sevilla, Cenicientos y detrás el Océano, aquí en Extremadura, hemos tenido algunas gotitas sueltas, el primer año de Luis Reina en Almendralejo, cuando trajo dos corridones de Toros en Agosto, una de SanchezYbargüen y otra de Miura, hace "sólo" 6 años, en Plasencia durante unos años no faltaba Victorino, ahora tenemos ese pequeño oasis que es Talayuela con su corrida de Adolfo Martín, por otro lado tenemos la provincia de Badajoz, copado por Cutiño y sus baby-toros, Mérida abandonada por la familia Postigo, la provincia de Cáceres que gozaba de mejor salud, a tiritones con la plaza de Plasencia con unos carteles de sonrojo, Cáceres humillada por Manolo Martín, unos políticos que no saben levantarla y un futuro incierto, y como es de humano buscar consuelo ante el dolor, me he recogido a pensar en la de ganaderías de bravos que pueblan nuestras dehesas, si bien somos un auténtico y desolador desierto de fiesta de los Toros, vivimos en un vergel de Toros, de ganaderías, de hectáreas y hectáreas dedicadas a la crianza del Toro Bravo. Quien no se consuela es porque no quiere.
He leído "Por las rutas del Toro" de Joaquín López del Ramo, año 1991 y ya hay gran número de ganaderos de encastes minoritarios que o bien han tirado la toalla o bien se han pasado al monoencaste.
ResponderEliminar¿Tenéis idea de si ese libro se va a reeditar , incluso corregido y aumentado?
Gracias.
Así es amigo Costi, buen y cortito análisis, salvo en el territorio Cutiño-Dominguez, (Olivenza, Badajoz, Almendralejo, Herrera del Duque, Don Benito), donde sale el torete monoencaste domecq con las figuritas, sin ni siquiera entremezclar algún que otro festejo en el que salga el toro de otros encastes y otros toreros, en Mérida, Cáceres y Plasencia de vergüenza y nos queda la Feria de novilladas de Moraleja y Talayuela, donde ya vimos el otro día como atascamos la taquilla (300 bien contaos)... ellos se lo comen y se lo guisan y están dejando la fiesta como un erial, pero el problema es que con esos cartelitos y con precios altos les va bien, así que algo de responsabilidad tendrá el público festivalero, presidencias orejeras y administración que mira para otro lado en lo tocante a la integridad y presentación de las reses, contando con los medios palmeros que jalean este circo
ResponderEliminarUn abrazo
Pgmacias
Y no te olvides de Zafra y sus terroríficas encerronas !!!
ResponderEliminarMe río por no llorar, porque cada vez que paso por los Bolsicos y veo lo que hay allí...
Un extremeño desencantado.