Como ayer vinieron las figuras del toreo hoy traen a los
modestos, dicho sea sin ánimo de ofender, y además con toros imposibles.
Previendo que las figuras no obtuvieran ayer el triunfo deseado, se pone al día
siguiente un cartel de imposible lucimiento para que nadie eclipse la aureola
de los supuestos maestros, jefes del escalafón y con inmejorables estipendios.
Hoy día se trabaja más en los despachos que en el ruedo. El mundo del toreo
está en manos de unos pocos que programan sólo para ganar dinero, no para
satisfacer a la afición ni tan siquiera al público, ni para descubrir nuevos
valores, ni para ayudar a toreros luchadores con vocación y entrega, sólo para
ganar dinero unos cuantos aunque en poco tiempo dejen la fiesta echa un solar.
Así pues se programa a Miguel Abellán, torero en la cuesta
abajo como vimos el otro día, a Arturo Saldívar, mejicano y a Víctor Barrio
recién ascendido a torero.
No cabe duda de que ellos no eligen los toros, les anuncian
con la ganadería de Manolo González cuyos toros han sido rechazados en el
reconocimiento, debían de estar tan fuera de tipo y tan escasos de trapío que
les dio vergüenza que saltaran a la plaza. Cambian por la ganadería de Fermín
Bohórquez, toros criados para los festejos de rejoneo, de características muy
diferentes a los de lidia, descastados, mansos y flojos. El quinto ha sido
devuelto por inválido y sustituido por un sobrero de Encinagrande que no era
mejor. Y naturalmente los tres diestros se estrellan contra un imposible, así
no hacen sombra a nadie pero pasan por la feria de San Isidro y se contabiliza
su fracaso, uno más aquí fracasa todo el mundo.
De cualquier manera y a tenor de lo que hemos visto esta
tarde, estos tres toreros están poco cualificados, ya que ante cualquier toro
hay que tener los recursos necesarios para hacer ver al público, toreando se
entiende, la naturaleza del animal, sus virtudes o defectos y lidiarle y darle
muerte con arreglo a sus condiciones. No podemos pretender poner la muleta
delante de estos bichos por redondos y naturales y justificar nuestra actuación
ante la negativa del animal a embestir o si lo hace sea con embestidas
incompletas, tornillazos y coladas. Al toro hay que someterlo desde el
principio con toreo dominador, mandando, para que se entere de que en la plaza
hay un torero que es quien decide lo que se hace en cada momento y encelarlo en
la muleta para que acuda presto a la llamada de su oponente hasta que al verse
dominado y vencido pida la muerte. El tercer toro de Víctor Barrio levantaba la
cabeza como una jirafa y le ha puesto los cuernos en la cara porque el torero
no le había dado ni un solo pase por bajo ni se los ha dado después como muy
bien me ha indicado Pepe Torres que ha estado hoy muy atento a la lidia ya que
es fiel seguidor de este torero y ha quedado decepcionado al ver como Víctor al
igual que sus compañeros de terna se aliviaban con el pico sin el menor recato,
intentaban pases imposibles con la muleta retrasada y mataban siempre con unos
bajonazos lamentables.
Hay que decir también que las manoletinas y las Bernardinas
se dan al final de la faena a un toro toreado, no son pases artísticos, son
pases de valor que demuestran precisamente que se ha dominado al toro. Hoy día
están totalmente fuera de lógica y más en la corrida de hoy.
Jandro
viernes, 18 de mayo de 2012
Lamentables los toros y mas lamentables aún, los comentarios de Molés y sobre todo de Caballero. ¿Qué les pasa a esos dos? Para mí hacen un flaco favor a la fiesta y a la afición, tratando de enmascarar lo evidente. Tendrían que ser recriminados por quien sea y obligados a comentar lo que verdaderamente está ocurriendo en el ruedo.
ResponderEliminarRigores.
Para los que estuvieron en la plaza. ¿Se protestaron los toros de salida? En la tele solo se escuchaban protestas cuando se caían pero de salida nada, y a mi personalmente me parecieron de una presentación lamentable.
ResponderEliminarMejor les hubiese ido si se hubieran quedado con los Guardiolas que rechazaron como señoritas ofendidas para quedarse con los Bohorquez de rejoneo. Nunca serán figuras ninguno de los tres, pero la exigencia como si lo fueran les descalifica bastante. Los toreros en general me parece que odian al toro, que a ese bicho sólo le queremos algunos aficionados.
ResponderEliminarUn saludo.
Ascensio.
¿ Comentarios lamentables? Y porqué, segùn ustedes ? ¿Porqué no ientienden nada, los lameculos des sistema o mejor porqué la sopa distribuida a los callejonarios es buena, sino sobre todo gratuita
ResponderEliminarSaludos