-Anexo nº 1 del Manifiesto de Aficionadospor una Fiesta Íntegra, Auténtica y Justa-
El punto número dos de nuestro “Manifiesto por una Fiesta Íntegra, Auténtica y Justa” reivindica “la necesidad de una profunda regeneración del espectáculo taurino, en especial de la suerte de varas como medida de la bravura del toro”. Creemos que esta suerte, realizada según mandan los cánones, es fundamental para el desarrollo de la lidia, ya que permite valorar las condiciones del toro y sirve para ahormar su embestida, además de ser uno de los momentos más emocionantes, bellos y espectaculares de la lidia del toro. Pero la suerte de varas, tal como se realiza en la actualidad, ha degenerado en un auténtico despropósito en el que la desidia de los profesionales y la vulneración del reglamento, con el consentimiento de la autoridad, se han convertido en una triste rutina y, más que para ahormar, se utiliza para destruir, en caso de los escasos toros con poder que saltan al ruedo, o se convierte en un simulacro, como es habitual que ocurra ante la falta de poder de la mayoría de los toros.
Por ello queremos desarrollar el segundo punto de nuestro Manifiesto, plantear algunas medidas que puedan ayudar en la regeneración de esta suerte fundamental con el objetivo de que vuelva a tener el protagonismo que nunca debió perder.
El punto número dos de nuestro “Manifiesto por una Fiesta Íntegra, Auténtica y Justa” reivindica “la necesidad de una profunda regeneración del espectáculo taurino, en especial de la suerte de varas como medida de la bravura del toro”. Creemos que esta suerte, realizada según mandan los cánones, es fundamental para el desarrollo de la lidia, ya que permite valorar las condiciones del toro y sirve para ahormar su embestida, además de ser uno de los momentos más emocionantes, bellos y espectaculares de la lidia del toro. Pero la suerte de varas, tal como se realiza en la actualidad, ha degenerado en un auténtico despropósito en el que la desidia de los profesionales y la vulneración del reglamento, con el consentimiento de la autoridad, se han convertido en una triste rutina y, más que para ahormar, se utiliza para destruir, en caso de los escasos toros con poder que saltan al ruedo, o se convierte en un simulacro, como es habitual que ocurra ante la falta de poder de la mayoría de los toros.
Por ello queremos desarrollar el segundo punto de nuestro Manifiesto, plantear algunas medidas que puedan ayudar en la regeneración de esta suerte fundamental con el objetivo de que vuelva a tener el protagonismo que nunca debió perder.
No hay comentarios:
Publicar un comentario