viernes, octubre 25, 2013

Aquel toro jarameño de Guerrita (José Ramón Márquez)

 ahí tenemos al gran Guerrita, torero largo y sin posible rival, (...), perfilado ante un imponente toro jarameño, bien armado y perfectamente sometido, un toro que está «pidiendo la muerte», al que va a matar de una estocada en buen sitio echándose afuera y otra contraria hasta el puño a más distancia y sin liar, de la que saldrá acosado por el toro.(...)
Cualquier bóvido de nuestros días, pongamos sin ir más lejos al miserable del cuvillejo Arrojado que indultó Manzanares en Sevilla, le sacaría por lo menos tres o cuatro arrobas al toro de Guerrita, pero bien sabemos que al deleznable Arrojado nunca se le ocurriría, con un estoque hasta la gamuza dentro de su cuerpo, salir corriendo detrás del que le hirió para tratar de acabar con él, que es el caso que nos ocupa, pues de no ser por el oportuno capote de Juan Molina, el toro a poco y se come vivo al mismísimo Guerrita.
Tratar de traer aquellos antiguos toreros al día de hoy, tratar de extrapolar las censuras de aquella época a nuestros días resulta algo tan ridículo y tan falso(...), porque posiblemente no haya en nuestros días un solo torero de los veinte primeros del escalafón capaz de estar dignamente frente a aquel toro de don Esteban Hernández que hizo correr a Guerrita, y eso que dicen que «hoy se torea mejor que nunca».
Por eso es que ponerse a imaginar qué habrían podido hacer July o Manzanares con el jarameño, con esa pinta, con esos pitones, con esas intenciones, o Guerrita con la birria de Arrojado, es algo que pertenece a la misma categoría que lo de creer que en los bosques, dentro de unas setas, habitan los gnomos.


José Ramón Márquez  (-Aquí el post completo- )

1 comentario:

  1. La ganadería de don Esteban Hernández procedía del Raso del Portillo, a lo que se añadió ganado de Maria Luisa Zapata. Finalmente el ganadero acabó desechando lo de procedencia castellana, quedándose con lo vazqueño, a lo que añadió reses de Trespalacios. Les llamaban 'los pablorromeros de Madrid'. Don esteban murió a causa de una caída del caballo embarcando una corrida para Madrid.
    La ganadería fue desgraciadamente extinguida a tiros por el Frente Popular. Sus nietos son los Hernández Pla, que tan buenos toros han echado en Madrid, entre ellos el Capitán, cuya pelea en varas se recogía en esta bitácora hace unos días. Sin embargo el encaste de lo de Hernández Pla era santacoloma, pues lo otro se extinguió, aunque les permitieron mantener los derechos de hierro, divisa y antigüedad en honor a la vieja Historia de la casa.
    Es fama que las últimas vacas de don Esteban fueron tiroteadas por el solo placer de acabar con ellas.

    Félix.

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