Hoy hemos recordado a este Torero.
“Con ese toro se respiraba tragedia, pero había que jugarse la vida. La tarde era para destacar porque Encabo es un torero cuajado y Alfonso Romero es un torero que llevaba tiempo viendo y le veía con condiciones. Yo no iba a ser menos. Cuando llegaron las banderillas, sé que lo hago mejor por el otro pitón, también sé que podía haberme aliviado, pero no lo hice. Cuando ya te ves cogido es una sensación extraña porque se te pasa la vida por la mente en segundos: los triunfos y las desgracias. Sé que me pudo haber matado o desgraciado. Para banderillear bien hay que dar el pecho y esa tarde no había alivio posible”.
Nota:He encontrado estas crónicas:
Nota añadida. copio el comentario recibido de un anónimo:
Mariano Jimenez, es un torero. Ni mas ni menos. Un torero con sentimeintos y amor a su "vocación". esa tarde, era su "ultima" posibilidad de entrar en la Feria de San Isidro, tras haber estado unos años retirado por "verguenza torera" al cortarse la coleta,en las Ventas por no haber estado a la altura de un toro de Hernandez Pla. habra toreros con mas "glamur", habra toreros con mas tronio, mas nombre y mas "pintureria", pero que sean mas toreros que Mariano Jimenez, no.
Mariano Jimenez, es un torero. Ni mas ni menos. Un torero con sentimeintos y amor a su "vocación". esa tarde, era su "ultima" posibilidad de entrar en la Feria de San Isidro, tras haber estado unos años retirado por "verguenza torera" al cortarse la coleta,en las Ventas por no haber estado a la altura de un toro de Hernandez Pla. habra toreros con mas "glamur", habra toreros con mas tronio, mas nombre y mas "pintureria", pero que sean mas toreros que Mariano Jimenez, no.
ResponderEliminarLa tragedia a palo seco. Razon tiene Boadella cuando dice que el toreo es la última de "las artes antiguas".
ResponderEliminarQuizás por ello sea que "progres glamurosos" se la quieran cargar.
El toreo cuando es de verdad se lleva por delante toda la frívola banalidad que nos inunda.
Magnífico recuerdo para un torero :Mariano Jimenez. Un respeto.
Dice el maestro Vidal: "Los aficionados sospechan que si siempre salieran los toros con esa presencia, esa entereza y esa casta, la mitad del escalafón se retiraba o, si no, los ponían firmes. A la parte superior del escalafón se refiere el barrunto".
ResponderEliminarLos toros eran de Cuvillo y recuerdo aquella corrida en una andanada de la plaza y un chaval detrás mía se tiró toda la tarde hablando de José Tomás sin prestar la más mínima atención a los toreros que había en la plaza. Cuando terminó la corrida, no me quedó más remedio que decirle que juntando los pitones de toda la camada de Cuvillo que había lidiado el de Galapagar esa temporada, no había para completar el de la corrida que acababa de lidiarse allí y a la que él no había prestado la más mínima atención.
Hoy al releer la crónica de aquella tarde me he acordado de la épica de Encabo en el sexto con la que caía sobre Las Ventas.
Un abrazo y gracias a Javier por recordarme mis tiempos capitalinos.
¡Mariano Jiménez!... simplemente UN TORERO, que se merece este modesto pero sentido homenaje....jabonero que verdad y realidad hay en tu comentario, como siempre en el punto.
ResponderEliminarPgmacias
Aun hoy sigo recordando a Mariano Jimenez matador de toros. Recuerdo que algunas veces el destino es injusto con algunos pero desde luego lo que nadie le quitara a ese torero es el recuerdo de los buenos aficionados. Ole Mariano en nuestras memorias sigues siendo una figura del toreo.
ResponderEliminarDesde luego que recuerdo a éste torero que vivió para el toro, que no se guardó nada para él. Desde luego que me acuerdo de sus triunfos en Madrid, en Pamplona, en Sevilla en una novillada, en Burgos, Valladolid, Cenicientos y muchas otras plazas tanto de primera como del resto de categorías. Sería muy injusto decir que solo le recordamos por cornadas como la de Madrid, le recordaremos como torero, profesional apoderado y empresario. es de los grandes y nadie le regaló nada,
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