TALANQUERAS DEL ESPÍRITU SANTO
Lo sucedido ayer en Las Ventas rebasa todas las cotas de indignidad. Parafraseo a Salva y adopto su tonillo, "la primera plaza del muuuuundo". Para clarificar, subrayo que ayer hubo Talanquera del 1; 2; 3; 4; 5; 6; ¡¡¡¡7!!!!;8;9 y 10, aquí sólo se salva el apuntador, o sea, yo, que mientras daba palmas de tango durante la faena (más que faena, "putada", que perpetró el presunto maestro Esplá al buen sobrero de Bohórquez, recibí miradas entre incrédulas e indignadas en el Alto del 9 (por supuesto, había gente que opinaba lo mismo, pero en silencio, claro). Ya al borrego primero de Guardiola lo había despachado con una serie de trapazos despegadísimos. En el toro de la "apoteosis", lo recibió con 4 ó 5 mantazos a la verónica, toscos, perdiendo pasos, rematados con media lagartijera que hizo vibrar a todas las talanqueras, ésas talanqueras que permanecieron gélidas ante los exquisitos lances a la verónica que instrumentó Bolívar a su primer victorino. Durante el tercio de varas, continuó este remedo de Pepe Hillo castigando con un toreo eléctrico por delantales, entre cada uno de los cuales giraba por partida doble sobre sí mismo, tipo El Soro en una mala tarde. En ese momento, Las Talanqueras del Espíritu Santo era un manicomio.
Último tercio: dada su incompetencia muleteril, el toro de ayer es lo peor que podía tener enfrente, es decir, un toro boyante, noble, con movilidad, de esos que destapan la falta de clase. Pues bien, ocurrió lo que tenía que ocurrir, que el rey estaba desnudo, pero los súbditos lo veían bien vestido, y lo jaleaban como tal. También me vinieron a la mente, mientras Pepe Hillo destoreaba,, los buenos naturales de Luis Vilches al 6º de Palha mientras sonaban los pitiditos talibanescos que ayer brillaron por su ausencia, incluso cuando perpetró Lagartijo, digo Pepe Hillo, un ignominioso sablazo entre el alborozo talanqueril y, una vez más, ausencia de protestas por los custodios de las esencias de La Talanquera del Espíritu Santo. Mientras, Pepe Hillo, en un alarde de gestos, parecía lamentarse de que se le hubiera ido la mano -como si alguna vez hubiera apuntado arriba- cuando tenía la talanquera patas arriba. El caso es que después de todo esto, Pepe Hillo se fue parsimonioso y carente del mínimo pudor, a saludar desde la mismísima boca de riego. Los custodios continuaron en silencio, cuando no aplaudiendo.
Curro
Lo sucedido ayer en Las Ventas rebasa todas las cotas de indignidad. Parafraseo a Salva y adopto su tonillo, "la primera plaza del muuuuundo". Para clarificar, subrayo que ayer hubo Talanquera del 1; 2; 3; 4; 5; 6; ¡¡¡¡7!!!!;8;9 y 10, aquí sólo se salva el apuntador, o sea, yo, que mientras daba palmas de tango durante la faena (más que faena, "putada", que perpetró el presunto maestro Esplá al buen sobrero de Bohórquez, recibí miradas entre incrédulas e indignadas en el Alto del 9 (por supuesto, había gente que opinaba lo mismo, pero en silencio, claro). Ya al borrego primero de Guardiola lo había despachado con una serie de trapazos despegadísimos. En el toro de la "apoteosis", lo recibió con 4 ó 5 mantazos a la verónica, toscos, perdiendo pasos, rematados con media lagartijera que hizo vibrar a todas las talanqueras, ésas talanqueras que permanecieron gélidas ante los exquisitos lances a la verónica que instrumentó Bolívar a su primer victorino. Durante el tercio de varas, continuó este remedo de Pepe Hillo castigando con un toreo eléctrico por delantales, entre cada uno de los cuales giraba por partida doble sobre sí mismo, tipo El Soro en una mala tarde. En ese momento, Las Talanqueras del Espíritu Santo era un manicomio.
Último tercio: dada su incompetencia muleteril, el toro de ayer es lo peor que podía tener enfrente, es decir, un toro boyante, noble, con movilidad, de esos que destapan la falta de clase. Pues bien, ocurrió lo que tenía que ocurrir, que el rey estaba desnudo, pero los súbditos lo veían bien vestido, y lo jaleaban como tal. También me vinieron a la mente, mientras Pepe Hillo destoreaba,, los buenos naturales de Luis Vilches al 6º de Palha mientras sonaban los pitiditos talibanescos que ayer brillaron por su ausencia, incluso cuando perpetró Lagartijo, digo Pepe Hillo, un ignominioso sablazo entre el alborozo talanqueril y, una vez más, ausencia de protestas por los custodios de las esencias de La Talanquera del Espíritu Santo. Mientras, Pepe Hillo, en un alarde de gestos, parecía lamentarse de que se le hubiera ido la mano -como si alguna vez hubiera apuntado arriba- cuando tenía la talanquera patas arriba. El caso es que después de todo esto, Pepe Hillo se fue parsimonioso y carente del mínimo pudor, a saludar desde la mismísima boca de riego. Los custodios continuaron en silencio, cuando no aplaudiendo.
Curro
Ya he sugerido que procede "HACERSELO MIRAR".
ResponderEliminarEl problema es que no sabria a qué especialidad referir el padecimiento.
El síndrome tiene una mezcla de ignorancia, escasa educacion, brotes de paranoia y "favoritismo doloso" que hacen dificil el tratamiento.
He oido que Doña Espe ha inaugurado nuevos hospitales, miren por ahí ... lo mismo se soluciona con una pócima sencilla y un buen médico de cabecera.
Soy esceptico . No siento el optimismo antropológico y de talante tengo el que me deja Talavante.
Curro!!!, no te reconozco. Has mutado al sector duro???
ResponderEliminarCurro es un infiltrado de los del autobus en la zona de los de chofer y clavel, pero no lo digais para que no lo desalojen
ResponderEliminarEsta bitácora debería obligar a un artículo de periocidad al menos semanal a Curro.
ResponderEliminarDesde luego que el término custodio es genial y muy apropiado, Las Ventas al vaiven de los custodios se ha vuelto caprichosa, lo de Esplá pudo ser más evidente (no lo ví) pero con el Cid también hay bula, y ya sabemos que los caprichos suelen incurrir en injusticias, sobre todo por comparación.
Un saludo a todos y más Curro por favor.
De hecho así reza su contrato con esta casa, pero como su denostado Curro, sólo luce su arte cuando tiene a bien.
ResponderEliminarFantástico post, Curro..."cumple" el contrato ¡por favor!
ResponderEliminarUn abrazo
pgmacias
Excelente la crónica!!
ResponderEliminarY por cierto Javier, muy bien traída la cita de Bergamín de más abajo. Si José lo dejó escrito en "La claridad del toreo", tú no traes menos claridad con recordarlo.
Un saludo
Lo que denominas delantales eran unas Navarras que Esplá ha practicado anteriormente en muchas ocasiones con mejor fortuna, por lo demás, si estuvieras sentado en tu sitio (la grada del 6) y no te mezclaras con tanto indocumentado, no te contaminarías tanto con influencias toreristas consentidoras y si además leyeras el blog, hubieras visto que compartimos eso que cuentas. No te avinagres (como me dijo a mí un día el C. Alatriste) que no estaba solo el apuntador, estábamos allí contigo compartiendo tu desesperanza todo el grupo.
ResponderEliminar¡Por fin alguien alaba la buena mano de Bolívar en el recibimiento de su primer Victorino! Esas "gélidas talanqueras" (y yo diría que también caprichosas) se portaron injustamente con el colombiano. Enhorabuena, Curro: hoy has puesto una pica en Flandes.
ResponderEliminarcurro, esta noche en la cena de fin de feria te dare un abrazo.
ResponderEliminarmás razon que un santo
elbibio