-El País ayer:
" (...)
De modo que cuando asumì las tareas de director en la fundaciòn de El Paìs no tuve que darle muchas vueltas a la hora de sugerir a Joaquìn Vidal que se uniera a nuestra aventura como titular de la secciòn taurina. Poca gente sabe que, asì como el deporte tardò en adquirir la relevancia adecuada en las pàginas del que serìa el periòdico de la transiciòn por antonomasia, la tauromaquia mereciò desde el principio trato de privilegio, debido en parte a las presiones que al respecto hizo el propio Josè Ortega Spottorno, que veìa en aquella secciòn un signo distintivo del caràcter orteguiano del diario. El nombre de La Lidia, que todavìa encabeza las pàginas de toros y que no era frecuente en la època, lo pusimos precisamente a instancias de Josè. Por lo demàs, la personalidad y pluma de Vidal encajaban perfectamente con lo que desde el primer momento querìamos que fuera la crònica taurina: un brindis literario y cultural a la controvertida tradiciòn minoica que pervive entre nosotros, (...) "
Juan Luis Cebriàn en el pròlogo del libro "Crònicas Taurinas de Joaquìn Vidal."
-El País hoy:
Ya no se trata sólo de que la llamada fiesta constituya un acto repugnante de acoso y degüello a un congénere animal (porque hay muchos toros más humanos que los que los miran desde las gradas, y muchas personas con cuernos): se trata de los efectos colaterales que una tal educación puede obrar en el alma de los más pequeños..." Luis Manuel Ruíz
Foto: Día de la salida del primer número del El País, fué en 1976.
desgraciadamente con la ausencia de Joaquin Vidal los de "provincias" perdimos toda nocion sobre lo que realmente ocurria en la Fiesta. Era nuestro referente de la realidad taurina. Madrid era el epicentro y lo demas era algo adyacente. Hoy en dia los "sobrecogedores" siguen malinformando. Dos orejas en Navalcarnero tienen mas importancia mediatica que una vuelta en Las Ventas.Esto es un desastre. Gracias a Dios que de vez en cuando El Pais con Antonio Lorca nos da una alegria con sus cronicas por su veracidad.
ResponderEliminarY si no hay posibilidad de otra cosa, apuntemonos a la cita de Santo Tomas..... "ver para creer".
En dos palabras: Alu - cinante.
ResponderEliminarLa diferencia entre El País de ayer y El País de hoy, es consecuencias del espejo, mientras antes Joaquín Vidal, no se miraba en el, hoy algunos si se miran en el espejo y de ahí se confirma el poder decir que hay muchas personas con cuernos.
ResponderEliminarClavelitos