La corrida de Los Recitales (José Luis Osborne-Domecq) ha sido un desfile de inválidos y descastados ejemplares. La excepción ha sido el quinto, un toro bravucón que ha empujado en varas y que sus embestidas pedían ser toreadas. Leandro ni se ha puesto en el sitio, ni ha encontrado la distancia, ni los terrenos..., es decir, no lo ha toreado y el toro se ha ido apagando.
Bien con los palos Miguel Martín y un buen tercio de varas de Agustín Sanz en ese quinto toro.
Una tarde anodina más.
Foto: Blog "Larga Cambiada"
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Nota añadida: Antonio Díaz y José Ramón Márquez se lo cuentan más ampliamente.
Nota añadida 1: Si quieren saber lo que pasó en Sevilla, les recomiendo el blog de la Unión Taurina de Abonados y Aficionados de Sevilla
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