Qué muleta más planchada la de Cid. Qué compostura en el cuerpo, el baile de la cintura acompasado con el ritmo del redondo. Compás. La inercia de la ligazón propuesta entre los dos muslos por la bamba roja de la muleta. No hay ventajas, ni violencias, sino pureza, cercanía. El pase de pecho al hombro contrario codilleando en el segundo tramo de la suerte, para ceñirse el toro y babear la hombrera...(SIGUE)
¿Y como es posible que ese gran Cid Toreador venido de alguna galaxia planchadora de muletas, le pegue doscientos muletazos a un toro protestado por cojo y no se caiga,ni se canse? ¿Y como es posible que ese gran "toreador", por enesima vez, pinche en hueso despues de una faena "cumbre" y luego en las entrevistas diga que no ahy problema, que le queda otra tarde?.
ResponderEliminar¿Como puedce decir que esa faena es la mas completa que ha hecho en Madrid despues de haber matado mal? ¿es que la estocada, en la "neotauromáquia", ya no forma parte esencial de la faena?. Si no aprende de una vez a matar como es de ley,¿porque no lanza el Cid a la conquista de Portugal?
En las pasadas Corridas Generales el Cid se llevó dos orejas de ley tras pinchar. Eso sí, entró a morir con todo el hambre de triunfo del mundo. A la segunda lo consiguió.
ResponderEliminarOtros vestidos de luces ni dan tan siquiera un muletazo....
MANUEL ORTEGA