martes, mayo 15, 2007

Puerta Grande

Pepe Moral ha abierto la Puerta Grande de las Ventas al cortar dos orejas a sendos novillos de la ganadería de Guadaira, encastados y mansos.
Pepe Moral ha estado toda la tarde en novillero, pendiente de los toros, con ansia de triunfo, muy dispuesto y lo ha conseguido, nos alegramos mucho cada vez que un novillero triunfa a ley, porque vemos en él la continuidad de la fiesta, la renovación del escalafón tan anquilosado, nos ilusiona de cara al futuro y nos emociona su emoción, la que se siente en el triunfo, en la conquista de una meta, en el logro de un reconocimiento importante en su carrera.
Pero esta alegría no nos impide recomendarle que revise sus apuntes sobre el “natural”, o los pida prestados si ese día se saltó la clase. Le hemos visto muy flojo con la izquierda y antes se decía: “en la mano izquierda están los cortijos”.

La novillada nos ha gustado, ha salido encastada, pedía el carné, decía nuestro inolvidable maestro Vidal, igual que la corrida de ayer que algunos confunden con ancestras fieras.
Será que en los tiempos que corren no acostumbramos a ver toros de raza y ni los toreros ni los espectadores ni los críticos aciertan a distinguirlos. O quizá los toreros sí y se van por la tangente, como ha hecho hoy el aspirante a torero Emilio Justo (tomará la alternativa en Julio). Emilio ha sido desbordado por la casta de sus dos novillos. Al cuarto, bravo, noble y repetidor (el mejor de la tarde) le ha enseñado todos los trucos de mal comportamiento de forma que el novillo se ha vuelto intratable y ha dejado de embestir con nobleza para cabecear peligrosamente, colarse y quedarse corto. Al primero de la tarde, también noble, le trataba de torear desde fuera de cacho y el novillo no se lo ha permitido, de forma que se ha dejado ambos sin torear y ha tenido la osadía de saludar desde los medios al cabo de su primera faena respondiendo a los tímidos aplausos de algunos entusiastas.

Pérez Mota ha dejado olor a buen torero en su faena al segundo, es una pena que no haya sido capaz de revalorizarlo en el cuarto, quizá le ha desanimado la denegación de la oreja por parte de la presidencia, esa injusticia ha podido producirle desánimo y le ha impedido realizar el torero que seguro sueña. Para triunfar en este mundo taurino es imprescindible no dejarse influir por las circunstancias, hay que tener espíritu de acero.

Numeroso público pedía la oreja para Pérez Mota, al igual que ayer para Robleño.
El Presidente de la corrida debe conceder la primera oreja cuando la mayoría del público la pida, le parezca merecida o no.
El público se puede equivocar pero es soberano, o al menos eso dice el reglamento, pero dice tantas cosas que no se cumplen.
Por ejemplo: ¿se han fijado Vds. en los calzoncillos blancos del caballo bayo de picar? ¿y en los verdes de otros días? Menos mal que tiene de quita y pon.

Jandro
14 de mayo de 2007

4 comentarios:

  1. Ni un solo aficionado discutía la enorme calidad de al menos una de las tandas de naturales (de seis o siete muletazos) que le ha pegado al sexto novillo. Menos jandro.

    Enrique

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  2. Coge la muleta por mitad del estaquillador, justo por la mitad, carga la suerte, lo intenta llevar largo. ¿Por qué mal concepto del natural? Yo pienso que hubo una serie por la izquierda realmente buena. En cuanto a la polémica de la corridad de Escolar. Usted las compara y dice que las dos pedían el carné. La de ayer lo pedía, la de anteayer lo quitaba -a mano armada-. El maestro Vidal no hubiera comparado estas dos corridas ni harto de vino.


    Jose

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  3. Hubo dos tandas de naturales de mucha clase, jandro...

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  4. TENDIDO DE SOFÁ:

    Guadaira / De Justo. Perez Mota y Pepe Moral

    Llegó Pepe Moral bien calzado porque habia arrasado con los zapatos de Alfaro y se los había llevado puestos. Pero ayer en Madrid Moral tenía hambre y cuando vió los preciosos novillos de Guadaira se dijo :
    - "Me voy a poner de grana y oro".

    El novillero Pepe Moral es como esos niños tragones a los que les dejan abierta la alacena de los dulces y se los zampan de dos en dos. Cuando todavia no había acabado con los meregues ya le estaba echando mano a los milhojas.

    Arrebatado y glotón no daba tregua , pero cuando se le calmó el estómago un poquito y embarcó con la derecha por abajo y con temple el novillo "Legionario" se transformó en un alferez de complemento hipnotizado en los vuelos de la muleta.

    Torea con gusto Pepe Moral como demostró en una gavilla de verónicas en los medios llenas de enjundia; pero no se conformaba, venía a saltar la banca como debe hacer un novillero.

    Con el sexto, de nombre "Frutero" ocurrió poco mas o menos. Otro atracón demasiado compulsivo hasta que descubrió las cerezas al natural y las engarzó con mano baja y series largas a cual mejores y sabrosas. Es lo que tienen las cerezas y los naturales ligados: tiras de una y viene un racimo.

    El novillero salió por la puerta grande relamiéndose la boca de escualo y chorreando los codos de cosas de buen toreo.

    Buena novillada de Guadaira y vendaval de Pepe Moral que se llevó por delante a sus compañeros de terna, demasiado ortodoxos y afligidos.

    Ya lo avisó el muchacho: "Hoy me voy a poner de grana y oro".

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