José Tomás "se dió el pire" (el Capitán Alatriste)

Todas las mañanas cuando bajo a comprar el periódico, el kiosquero me dice: “José Tomás ha perdido su sitio. Eso no es torear”. El otro día le pregunté si había visto la entrevista que concedió para la cadena mexicana “Televisa”. “Si yo fuera una figura del toreo –me contestó- jamás saldría sin afeitar y vestido con un niqui de playa. Un torero es torero para todo”. Y no le faltaba razón. José Tomás se mostró imperdonablemente torpe tanto en las formas como en el contenido. Copio a continuación dos preguntas de la polémica entrevista:
Pregunta: Que significa Enrique Ponce para ti? José Tomás: Ponce creo que es un gran torero, pero él entiende el toreo de una manera totalmente contraria a la mía. Entendemos el toreo de manera muy diferente.
Pregunta: ¿Cuál es la diferencia? José Tomás: Pues, creo que... es que no sé, eso lo tendría que decir él. Pero yo pienso que él entiende el toreo como que hay que arriesgar lo menos posible. Digamos que no hay que pasar determinadas líneas y yo no lo entiendo así. Partiendo de esa base, te digo que vemos el toreo de manera opuesta completamente.
Si eres TORERO y te metes en un “fangal”, sal de él toreramente. Una figura no puede contestar “Es que no sé, eso lo tendría que decir él”, mientras se rasca el brazo obsesivamente (vean si no las imágenes). Un TORERO siempre debe dar la cara y no “darse el pire” (utilizando una expresión muy “López Chaviana”).
Si José Tomás realizó esa entrevista es porque, a los matadores contratados en tierras aztecas, se les obliga a “promocionarse”. Es decir, no sólo tienen que torear, sino también hacer marketing. ¿Será necesaria una sola entrevista para llenar La Monumental de México?
Obligaciones contractuales aparte, mi kiosquero, como todas las mañanas, dijo una verdad como un templo: “Un torero es torero para todo”.