Apenas ha visto media docena de pañuelos blancos
revoloteando entre el cemento el usía Trinidad y ha concedido la primera oreja
de la tarde fruto de la labor hecha por Morenito de Aranda al segundo toro.
Un rato después ha vuelto a conceder oreja a Antonio Ferrera
por su labor en el cuarto toro y de nuevo al finalizar la lidia del sexto
concede oreja a Alberto Aguilar.
Visto desde la mencionada estadística no se debería poder
decir que ha sido una tarde de toreo desastroso, resueltas las faenas con
mantazos desde muletas retrasadas a toros mansos, descastados y justos de
fuerza que no han recibido ni un puyazo.
Han saltado al ruedo tres toros de la ganadería anunciada:
El Cortijillo y otros tres de Lozano Hermanos.
¿Es posible que apenas empezada la temporada no hayan
encontrado seis toros para Madrid en una misma ganadería?
A medida que saltaban al albero nos parecía más una limpieza
de corrales que seis toros seleccionados para una tarde en Las Ventas.
Y con este material los toreros, impecablemente ataviados,
han procedido a realizar un cúmulo continuo de desafueros en todos los tercios
y en todos los toros.
Una tarde para olvidar en la que han resultado especialmente
lamentables los seis pares de banderillas que ha colocado Antonio Ferrera a sus
astados.
jueves, 02 de mayo de 2013
Jandro
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