1º.- En principio debo decir que a Mérida no deben venir presentadas de la manera que han venido las dos corridas de “toros”, especialmente la de “Jandilla”, una “novilladita”, en escalera por los pesos, sin cara, sospechosa de pitones, mansa y descastada en general y sin fuerzas, destacando por lo impresentable el tercero de pinta “jabonero”. La otra, la de Joselito-Martín Arranz con un remiendo de Jandilla, también con poca cara aunque algo más pareja y mejor rematada, también sospechosa de pitones, fue un “bombón” para los toreros, a excepción del 6º de la tarde, que le tocó en suerte a Alejandro Talavante, sin cuello lo que le impedía humillar, que fue complicado. Algo está claro si no hay TORO no hay nada, la importancia que tiene lo que hace el torero la da el toro que tenga delante.
2º.- El primer día, el día 1, ABURRIMIENTO Y CABREO...pero me encontré con amigos, menos mal. Lo voy a titular de manera sobrada para que se entienda : “ En el Coso de San Albín, atraco a mano armada, la policía de vacaciones y Miguelín Murillo en el tendido”, lógicamente es un símil, que no se enfade la policía.
Ese día se vistieron El Cid, El Fandi y Perera.. Poco que decir por lo que tenían delante, máxime teniendo en cuenta que en el campo se le ha quedado a D. Ramón Sánchez Ibargüen una seria CORRIDA DE TOROS que en principio fue reseñada para ese día, pero parece ser que por presiones de algún torero del cartel fue sustituida por estos bochornosos e impresentables “jandillas”. La suerte de varas, pues mejor la llamamos del “picotazo”. Del Fandi, vulgar en todo, en banderillas poniendo algunos de sus pares a toro pasado, sólo decir...como siempre... que la muleta la maneja como si de un cacho de trapo se tratara, pero por supuesto no “pá toreá”. El Cid, más que discreto, en su “ruta” de este año, creo que se le regaló el despojo que cortó. De Perera, no puedo decir nada, un comienzo de faena al sexto aseada y su eficacia matando sus dos toros con estocadas bajas. Destacar en banderillas al Alcalareño en el primer toro del Cid...Media plaza si acaso, el empresario debiera reflexionar porqué con ese cartel. De este desaguisado tienen la culpa el ganadero que los cría, el empresario que los compra y se deja en el campo la de Sánchez Ibargüen, corrida con trapío, los toreros que los exigen y “se ponen delante” y este que les habla por haber sacado una entrada en taquilla.
3º.- El día 2, algo más de media plaza. Toros con escasa cara, ¡que coño sin cara para una plaza de 2ª!, de mucha nobleza en general, excepto el sexto, justitos de casta... Se vistieron Antonio Ferrera, César Jiménez y Alejandro Talavante. Ferrera estuvo pletórico en sus dos toros, me devolvió en el ruedo lo que pagué en taquilla, la plaza enloqueció con lo que hizo a su segundo toro, con un tercio de banderillas vibrante, en la muleta el toro se comportó como sueña un torero, todo nobleza, fijeza en los engaños y entregado humillando, se quedaron cosas en el tintero y le recetó un estoconazo, paseando los máximos trofeos. Cesar Jiménez, como ya sabéis no me emociona, no me puede emocionar, por ser el alumno más aventajado del “más más” del destoreo, pero lo hace componiendo bien la figurita, lo vende mintiendo bien, es un “artista de la estética”, con el capote de salida a su primer toro se puso “bonito”, con la muleta pues eso, piquito, fuera de cacho, pierna contraria “p’atrás,” pero hay algo claro, el público que es soberano le pidió la oreja en el primero y las dos en el segundo, premios para mi de todo punto más que excesivos, sobre todo la segunda oreja que le “otorgó” el presidente a su segundo animal. Alejandro Talavante, para mi el torero que más me llega actualmente, me parece que estuvo mermado de facultades por la cornada del Escorial el día 10 de agosto, a pesar de ello lo vi con decisión, pisando ese sitio que casi ninguno pisa porque tiene...mucho peligro. Me emociona este torero por su quietud, su temple ante la cara del toro y con la muleta, sus cites (dando el pecho, la muleta planchada, cargando la suerte, de arriba abajo y de adelante atrás, por debajo de la pala del pitón hasta detrás de la cadera, toreando con verdad)...y por supuesto por su valor, fijando las zapatillas al albero, pero...es MATADOR DE TOROS y los toros hay que matarlos por arriba haciendo la suerte como debe ser. Estuvo algo ido, un poco ausente, insisto, quizás por su estado físico, pero es un torero al que hay que seguir muy de cerca. La emoción me la transmitieron Antonio Ferrera y algunos pasajes de las dos faenas de Talavante. Muy bien el Niño de Leganés lidiando...el detalle de la tarde corrió a cargo de Miguel Murillo, tercero de Ferrera, que hizo un quite muy oportuno a uno de sus compañeros.
Así lo vi, lo sufrí y me emocioné con algunas cosas...y llegué a una triste conclusión. : difícilmente me volverán a ver en el tendido del Coso de San Albín mientras no venga el toro presentado adecuadamente para lo que esta plaza merece.
NOTA APARTE: Gracias Pedro.Pie de foto: La conspicua afición emeritense aplaude a Antonio Ferrera en banderillas.
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