No seamos ingenuos. Estas cosas nunca son inocentes. La imagen no inspira precisamente afición, o reconocimiento, a la tauromaquia. Va con segundas. Los viejos y legendarios maestros nunca habrían aprobado este cartel.
EL toro parece una lagartija,como afirma con acierto uno de los participantes, yo añadiría que es lo que queda de una lagartija a la puerta de un hormiguero. No aparece la fiera, el totem cargado de energía, dispuesto a vender cara su vida,lo que debe ser el toro, sino una criatura desvalida, atravesada, en su caída por el despeñadero, hacia abajo, sin remedio. No es un cartel de toros. Es otra cosa.
Me gustaria conocer "la factura y contraprestaciones" del genial artista, autor de "Toro-Lagartija al espeto". Tengo entendido que se prepara una segunda variante: "El martirio del toro-sebastian tullido".
Seguimos con el cachondeo. Otro escarnio más para esta maltrecha fiesta a la que le sacuden bofetones por todos los lados. Claro, que la culpa es de quien encarga a Miquel Barceló la realización de un cartel taurino. Ya se sabe, el que con niños se acuesta... Lo mismo que el que hace un encargo de estas características a semejante fantoche.
Su Santidad ha dado en el clavo con la maestría que acostumbra, cuando habla de factura. No solo lo que se haya tenido que pagar por el cartel, sino que el cartel mismo, por polémico, le va a reportar extraordinaria publicidad a su autor.
Conocí a Barcelo a primero de los años ochenta después de una corrida de toros, en la Tienta, calle Pedro Heredia,y salimos un par de veces. A pesar de estar ambos caninos, la impresión que desde el principio me causó este chico es de que era un lince para las finanzas. Seguramente resto de los chuetas de Felanix, su pueblo de nacimiento.
A mi no me gusta nada el cartel, creo que con ese cartel se dan más motivos a los que atacan a la fiesta. Muchas veces deben mirarse las repercursiones que puede tener antes de elegir algo así, porque esto va a dar mucho que hablar y seguro habría otras opciones más adecuadas que nos evitarían las polémicas que van a surgir.
La visión estrecha y resentida es una de las caracteristicas de la afición taurina de nuestros dias. Si no sembramos ilusión, si no atraemos talentos jóvenes a nuestras filas, los antitaurinos van a ver reforzados sus argumentos. Señores los antitaurinos no son tontos. Ellos se arrogan la bandera de la modernidad tildando de crueles y retrogrados a los defensores de la tauromaquia. Miquel Barceló es provablemente el artista plastico de mas proyeccción internacional en estos momentos. Para sorpresa de los "cultos" antitaurinos, es autor de una extensa e intensa obra sobre la tauromaquia. El artista de Felanix tiene una magnifica relación con LUis Francisco Esplá de la que han salido reflexiones plasticas originalisimas. Este cartel, como toda obra de arte puede y debe ser objeto de critica. Pero desde mi modesto punto de vista, creo que es interesante conocer bien la obra de un artista antes de poner en duda sus "oscuras" intenciones. En este sentido yo recomiendo a los interesados revisar la obra que Miquel realizo en la iglesia de Santa Eulalia dei Catalani de Palermo, en 1998. Aquí se muestra su reflexión sobre "El Cristo de la Vucciria" con una serie de gigantescas pinturas monocromas sobre papel. Creo que la visión de estas pinturas aclarará bastante en sentido del cartel de Sevilla.
Muy controvertido será, este cartel va a traer cola.
ResponderEliminarLa condesa de Estraza
Parece un cartel antitaurino. Es verdad, que nos lleva al toro y al hombre prmitivo, alanceado...pero hoy en dia va a levantar ampollas.
ResponderEliminarSí, donde pone "Toros" sólo falta el "NO". Pero vamos, a mí me gusta, provocador como la Fiesta. A ver qué dice Alma, que entiende de arte y tal.
ResponderEliminarMe huele que va a dar mucho que hablar, sobre todo entre los "abiertos" maestrantes.
ResponderEliminar¡Abajo el toro lagartija!
ResponderEliminarFelicidades a todos.
Oselito.
Era dificil superar el horror estético de los últimos años , pero se ve que esta temporada vienen "crecidos".
ResponderEliminarDe lo feo que es, es antitaurino...
ResponderEliminarNo seamos ingenuos. Estas cosas nunca son inocentes. La imagen no inspira precisamente afición, o reconocimiento, a la tauromaquia. Va con segundas. Los viejos y legendarios maestros nunca habrían aprobado este cartel.
ResponderEliminarEL toro parece una lagartija,como afirma con acierto uno de los participantes, yo añadiría que es lo que queda de una lagartija a la puerta de un hormiguero. No aparece la fiera, el totem cargado de energía, dispuesto a vender cara su vida,lo que debe ser el toro, sino una criatura desvalida, atravesada, en su caída por el despeñadero, hacia abajo, sin remedio. No es un cartel de toros. Es otra cosa.
ResponderEliminarPues parece que ademas de lanceado lo ha pillao un camión y le ha partido las patas.
ResponderEliminarQue arte mas grande.
Dos manchas y lo que trasmite.
Me gustaria conocer "la factura y contraprestaciones" del genial artista, autor de "Toro-Lagartija al espeto". Tengo entendido que se prepara una segunda variante:
ResponderEliminar"El martirio del toro-sebastian tullido".
A mi tampoco me agrada nada, y a mi post me remito...
ResponderEliminarSeguimos con el cachondeo. Otro escarnio más para esta maltrecha fiesta a la que le sacuden bofetones por todos los lados. Claro, que la culpa es de quien encarga a Miquel Barceló la realización de un cartel taurino. Ya se sabe, el que con niños se acuesta... Lo mismo que el que hace un encargo de estas características a semejante fantoche.
ResponderEliminarSu Santidad ha dado en el clavo con la maestría que acostumbra, cuando habla de factura. No solo lo que se haya tenido que pagar por el cartel, sino que el cartel mismo, por polémico, le va a reportar extraordinaria publicidad a su autor.
ResponderEliminarConocí a Barcelo a primero de los años ochenta después de una corrida de toros, en la Tienta, calle Pedro Heredia,y salimos un par de veces. A pesar de estar ambos caninos, la impresión que desde el principio me causó este chico es de que era un lince para las finanzas. Seguramente resto de los chuetas de Felanix, su pueblo de nacimiento.
La condesa de Estraza
A mi no me gusta nada el cartel, creo que con ese cartel se dan más motivos a los que atacan a la fiesta. Muchas veces deben mirarse las repercursiones que puede tener antes de elegir algo así, porque esto va a dar mucho que hablar y seguro habría otras opciones más adecuadas que nos evitarían las polémicas que van a surgir.
ResponderEliminarEs un poco siniestro,y tiene un tinte antitaurino,para mí no representa a la fiesta para nada.
ResponderEliminarLa visión estrecha y resentida es una de las caracteristicas de la afición taurina de nuestros dias. Si no sembramos ilusión, si no atraemos talentos jóvenes a nuestras filas, los antitaurinos van a ver reforzados sus argumentos. Señores los antitaurinos no son tontos. Ellos se arrogan la bandera de la modernidad tildando de crueles y retrogrados a los defensores de la tauromaquia. Miquel Barceló es provablemente el artista plastico de mas proyeccción internacional en estos momentos. Para sorpresa de los "cultos" antitaurinos, es autor de una extensa e intensa obra sobre la tauromaquia. El artista de Felanix tiene una magnifica relación con LUis Francisco Esplá de la que han salido reflexiones plasticas originalisimas. Este cartel, como toda obra de arte puede y debe ser objeto de critica. Pero desde mi modesto punto de vista, creo que es interesante conocer bien la obra de un artista antes de poner en duda sus "oscuras" intenciones. En este sentido yo recomiendo a los interesados revisar la obra que Miquel realizo en la iglesia de Santa Eulalia dei Catalani de Palermo, en 1998. Aquí se muestra su reflexión sobre "El Cristo de la Vucciria" con una serie de gigantescas pinturas monocromas sobre papel. Creo que la visión de estas pinturas aclarará bastante en sentido del cartel de Sevilla.
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