jueves, julio 26, 2007

Ángel de la Rosa y las leyendas


Escribe, hoy en El Mundo, Javier Villán:
Ángel de la Rosa y las leyendas:
Héroes sin laurel y sin fortuna. Angel de la Rosa, la izquierda del prodigio y la espada misericordiosa: Un trofeo y dos perdidos por pinchauvas. A De la Rosa, sin leyenda, lo han crujido los toros. Hoy, mano de obra por los naranjales. Este triunfo, ¿será de oro o estadística inútil? Defensa de la Fiesta; desde la Plataforma y, sobre todo, desde el suelo. Leyendas y mitologías. Mas las leyendas se desvanecen y llega la pesadilla del toro agraviado y humillado. Fácil es hacer mercadería del mito. Mientras, De la Rosa florece entre naranjos.
Ceñido, apretado en un puño, surgía el natural limpio, mandón, cargando la suerte, marcando el viaje, por abajo y largo. Y otro más. Por fin, De la Rosa había impuesto su ley en tres series cortas, de tres y el de pecho. Volvió por una serie al toreo en redondo, que surgió de nuevo templado, también relajado y embraguetado. Luego, cambio de mano, y en el sitio ligado el natural. Otra serie, la faena hecha, el torero dominador.
Foto: Rafael Mateo

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