"Fíjese usted, al toro hay que engancharle antes de que llegue al cuerpo, con la mano izquierda o con la derecha, eso es indiferente, lo importante es llevarle toreado, y para conseguir eso hay que echar la pierna contraria hacia adelante, y hacia adelante quiere decir hacia el frente del toro -no hacia atrás, como usted hace- para poder llevar al toro toreado cuando pasa por delante de uno. "
Siempre he oído a un banderillero viejo de mi pueblo decir que si uno se quiere poner rico en esto lo que tiene que hacer es, una vez que se arrenque el toro, echarle la punta de la zapatilla contraria al hocico, y no le faltaba razón porque eso a estas alturas sí que sería una "novedad" que diferenciaría al que lo hiciera del resto.
ResponderEliminarOselito.
Desastre! Quedan solo los primeros tres capitulos...
ResponderEliminarGracias de todas maneras,
Isabella
Así es Oselito, por esos los viejos que nos formaron como aficionados nos decían que a los toreros se les debe mirar a los pies (y a la cara, en mi caso también se me dijo).
ResponderEliminarVaya tres lo tres de la fotografía, que pedazos de tíos, y los tres con tres estilos diferentes.
La condesa de Estraza
Perdonen el comentario anterior,ya encontrè los otros capitulos en el Chofre.
ResponderEliminarIsabella
Y yo he corregido el enlace.
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