El
arte nos llevará a la nada.
Rotunda
afirmación de Agustín Díaz Yanes, que se enmarca en su análisis
de la situación actual de la tauromaquia. Lo importante en los toros
es la emoción y el toro de hoy proporciona pocas emociones, dice. En
los años 60 y 70, el toro se movía más, lo que provocaba mayor
incertidumbre y emoción. El toro de ahora, es una verdadera tragedia
para la tauromaquia, pues está criado para sustituir la emoción por
el arte.
Es triste ver el nivel de pensamiento que rodea la tauromaquia actual. Diaz Yanes es un buen guionista, autor de obras desiguales. Su cumbre "Nadie hablará de nosotros...." tiene como contra retrato, su "Alatriste" de triste recuerdo. A la hora de expresar ideas hay que ser mas riguroso. Sin emoción no hay arte. Sin verdad, tampoco. El toro actual, simplemente no es toro, por la misma razón que un cuchillo sin afilar no es cuchillo. Tiene forma de cuchillo, mando de cuchillo y hasta una hoja larga de cuchillo, pero si no corta, no es cuchillo. Konrad Lorenz, un etólogo y naturalista norteamericano, premio Nobel, expresó en uno de sus libros mas curiosos, (Man meets dog), la idea de que los perros de raza de los concursos, no son representativos de sus razas porque si bien por fuera lo parecen, por dentro, en su carácter y comportamiento, no lo son.
ResponderEliminarCon estas premisas, la corrida actual no está hecha para el arte. Está hecha para el fraude. Para la instalación de lo mediocre, para el sucedáneo, para la mentira. Toros de mentira y toreros de mentira, para un publico acrítico y manipulado por una prensa y unos "intelectuales" de mentira.JUANSINTIERRA