Vacas serias, astifinas, con casta, listas, de las que no perdonan el fallo, de las que ni se "dejan", ni "colaboran" ni demás zarandajas. Pura dinamita.
Allí no se respiraba ese ambiente lúdico-festivo que nos transmiten , vía internet, tantos toreros y novilleros a la vuelta de sus tentaderos. Allí se respiraba tensión y responsabilidad.
Frente a las vacas un novillero, Louis Husson, que supo responder con inteligencia , disposición, valor y técnica a todas las complicaciones que allí se plantearon , (aquí incluyo hasta las meteorológicas)
Fue un buen reencuentro con mi afición.
Por ahora solo nos queda esperar a que alguna comisión taurina de aficionados anuncie una corrida de toros de los Hermanos Quintas, de origen Martínez, y apuntarnos el nombre de Louis Husson, al que deseamos ver en breve en numerosos carteles.
Fotos: André Viard
No hay comentarios:
Publicar un comentario