Día negro para la fiesta de los toros el vivido en Pamplona. Un insulto soez, un ataque inmundo, una vergüenza… La Casa de Misericordia claudicó ante las figuras con una becerrada insolente, que era una ofensa para quienes se han medido con toros de verdad; claudicaron los veterinarios al aprobarla
Antonio Lorca
Cuando abandoné la plaza me vinieron unas náuseas mentales tratando de articular de memoria lo que vimos este lunes en Pamplona. Y es que el espectáculo fue, así, como suena, nauseabundo. Las llamadas figuras se trajeron una corrida de ese doble nombre Garcigrande/Hernández, una novillada despitonada y de infame borreguez, que la habrían podido matar en Brihuega
Carlos Illán
El Juli y sus garcigrandes debajo del brazo paseándose por España. No hay responsabilidad alguna y ya pueden contratar al que inventó la Coca-Cola para hacer una campaña de 'marketing' que esto no lo arregla ni San Dios. No interesó una mierda Juli pegapases con la indecente bondad del torete.
Vicente Zabala
Aficionados, o terminamos con los julis, garcigrandes y cia o ellos acaban con la fiesta.
Hasta Zabala, metiendo caña, como tuvo que ser el esperpento. En Brihuega, no salen con los pitones tan escobillados. Y los toros de este año, que los cambiarón porque venía el Rey, tenían una presencia como los de la plaza de Valencia y de Malaga, con los pitones limpios y todo.
ResponderEliminarNo nos torearan,la fiesta tiene que continuar.. Merece ver a estos fenomenos,hay emocion,cada cual se busque su entretenimiento,yo Taurina...Si es cierto,algunas veces no son buenos toros,pero un torero siempre intenta hacerlo bien.para mi todos son unos valientes profesionales.ARRIBA ESE ARTE , a mi consigue ponerme los pelos de punta,se podra decir de otra manera,es cierto,me escalofria ver una buena faena
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