martes, abril 16, 2013

Morante desata a las musas


Yo he visto hoy sangrar a tu capote por las venas. Lo he visto llorar, lo he visto crujir, lo he visto bailar… Le he visto parir los lances, Morante. Yo he visto la cintura quebrada de Gallardo y las muñecas de Salomón Vargas. He visto el duende de los Gitanillos y en la media, Morante, yo he visto a Chicuelo el de la Alameda.
Álvaro Acevedo


 Morante toreó dentro de una foto. No de una fotografía cualquiera, sino una que, detenida la imagen, provoca el vértigo que da al toreo cuando es lento. Es foto, pero, mirando, algo se mueve. Se ve a miles de seres levantarse de sus asientos. Pero es imagen detenida. Se aprecia el vuelo de los vencejos, a su compás. Pero están en el recuadro de la foto. Miras y ves el leve movimiento de las banderas y el parpadeo rítmico de quienes miran al ruedo.
C.R.V

El genio del percal rosa plantó un día de abril en La Maestranza su dicotomía febril.Dejó que se viera en su testa la bandera de los hombres cuando no les importa ser Dios, cuando viven y mueren partiéndose el alma en los vuelos de un percal. Y en ese albero se derramó por completo para marcharse pleno después de alzar la voz.
 La alzó para enseñarle a Sevilla y al mundo que los genios que lo han sido se hubieran convertido en dioses con cuarto y mitad de su valor, una pizca de su entrega y tres de su compromiso.
Marco A. Hierro 

Como escribe José Ramón Márquez:
 Es ponerse Morante a hacer monerías y ya tenemos en la piscina chapoteando a los críticos. Basta tan sólo una media verónica. Hay uno, harto sensible, que crea una imagen propia del ultraísmo calificándola como un ‘campanazo a cámara lenta’; otro, más bergsoniano, dice que la media ‘duró, directamente, toda una eternidad’; otro, como quien dice Paco Calvo Serraller, dice que ‘esculpió cinco verónicas y una media’; otro, entre el conductismo y Tamarit, afirma que ‘entre la indolencia y el arte de repente surgió la magia de una media’; aquél, más escorado hacia Polibio, que hubo ‘una media de antología, para la historia’ y, en fin, otro más próximo a Lassalle el de la (perrifláutica) Cultura, presenta el lance como ‘razón más contundente de que el toreo es una de las bellas artes’

3 comentarios:

  1. Qué comentario tan desafortunado el de Jose Ramón. Intentar menospreciar la media verónica y a Morante. Habría pagado lo que fuera sólo por ver la media a cámara lenta que le recetó a su segundo. No sé por qué algunos les cuesta tanto diferenciar lo bueno de lo vulgar. Peor para ellos.

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  2. Muy bien dicho.....

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  3. Morante pasará a la historia como uno de los grandes artistas de la tauromaquia, que no todos los son. Hay grandes toreros de mucho poderío, pero artistas de verdad poquitos, y eso es lo que la gente debe valorar, aunque derrame sus esencias con cuentagotas...

    ¡Un saludo!

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