Reventado sin pudor el carácter torista, eliminada, incluso, esa propuesta de mínimos en la que lo comercial y lo torista se equilibraba a razón de cuatro corridas de cada encuadre, la Junta Administrativa que regenta el coso conseguido lo más difícil: que la feria de Bilbao destaque porque no tiene nada que destacar.
Ocho corridas de toros de las cuales tan sólo, y con ciertas reservas, pueden calificarse como toristas las de Miura y Victorino.
Lo comercial campa a sus anchas en una cartelería sin una solo tarde rematada. Vulgar a más no poder lo que antes era toda una referencia en la temporada.
(sigan leyendo...)
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Pues a mi precisamente la ausencia de pocos carteles redondos, que sólo se puede decir que haya dos, me gusta. Es así como se puede y se debe renovar el escalafón.
ResponderEliminarSobre el plantel se puede debatir más. Pero además de las presencias de Victorino y Miura, destacaría Fuente Ymbro o Alcurrucén.
un saludo.
Hombre Andrés,creo que lo que se reivindica por Eneko de frenta y por derecho, es algo MUY CLARO Y MERIDIANO...la "redondez" de los carteles es como la cuadratura del círculo con el planteamiento de los Choperas, que son los responsables de bajar el listón en conjunto con la Junta Administrativa...creo que queda muy claro lo que se plantea de lo que fue y es al día de hoy Bilbao
ResponderEliminarUn saludo
Pgmacias