miércoles, febrero 17, 2021

Aida Jovani por J. Porcar

 



A principios de este esperanzador 2021, que a medida que va avanzando ya no lo es tanto, visite la ganadería, que con este reportaje les presento, esta es la de “Aida Jovani”, el día en el que la visite no era el más adecuado para fotografiar el ganado, ya que este, estaba bastante molesto he inquieto debido al fuerte viento reinante, pero con paciencia pude recopilar las distintas instantáneas que conforman este reportaje: tras fotografiar el ganado tuve una bonita he interesante charla con el ganadero Pedro Jovani; en la cual fue narrando los diferente hechos y aspectos de la ganadería; haciéndolo con verdadera pasión. 

 



Lo primero que apunto es que la ganadería, desde que su hija cumplió la mayoría de edad, está, la puso a su nombre, esto lo hizo a modo de regalo, por lo que en los carteles, desde entonces se anuncia como ganadería de “Aida Jovani”; afortunadamente su hija cuenta con afición y aunque Pedro sigue y seguirá al pie del cañón, son muchas las ocasiones en que su hija le acompaña en las diferentes tareas de la ganadería. La segunda cuestión que abordamos, fue el por qué se hizo ganadero; ya que este no cuenta con antecedentes taurinos en su familia, la respuesta fue obvia y rápida, “por afición y amor a este bello animal” y cuando su estatus económico se lo permitió, se hizo ganadero, lo primero fue el comprar la finca; él le tenía echado el ojo a una finca que está situada en el término castellonense de San Mateu , la tenía bastante vista, pues él es de un pueblo vecino Xert, su nombre es “La Fonteta” y en ella Pedro toreo por primera vez una becerra, por lo que le tenía un especial cariño, afortunadamente para él, en 1999, concretamente el 15 de mayo compro la finca, que no el ganado, a su anterior propietario y también ganadero Octavio Besalduch, por lo que antes de traer ganado tuvo que hacer pocas reformas en la finca, aunque ya se sabe que una finca ganadera siempre está expuesta a alguna que otra obra o reforma: los primeros animales llegaron en el 2000, estos fueron un lote de toros de la ganadería de La Herguijuela, para venderlos para las calles; lo siguiente y todo en el mismo año fue comprar un hierro de la Asociación de Ganadería de Lidia y seguidamente un lote de cuarenta y cinco y dos sementales de la ganadería de Cayetano Muñoz, procedencia Salvador Domecq, Torrestrella y Los Guateles, con el paso de los años ha ido reforzando la ganadería con la adquisición de nuevos sementales, aparte de ir sacando los suyos propios, todos los sementales que han ido padreando de fuera, han tenido el mismo origen Domecq, vía Jandilla o Juan Pedro, los últimos dos sementales, los ha adquirido el año pasado, llevan el hierro de Garcigrande, de esta manera puede abrir mucho las líneas y no tener problemas de consanguinidad, que no ha tenido nunca. 

 



En la actualidad la vacada está compuesta por ochenta y cinco vacas y siete sementales, en total son unas doscientas setenta reses las que hay en la finca, que no son pocas en los tiempos que nos está tocando vivir. 


 

Afortunadamente para la ganadería, no está teniendo problemas de comercialización, ya que todos los años lidia todas las reses preparadas para la temporada, animales estos que lidia casi en su mayoría en novilladas sin picadores, llegando ya, ha debutar con una novillada picada, evidentemente no tiene problemas para venderlos, señal inequívoca de que embisten y claro una de las razones es la selección llevada a cabo, tras el paso de los años en las tientas, en estas da la misma importancia al caballo de picar que al juego dado en la muleta, con la diferencia que exprime más los animales en la muleta que en el jaco, lo que no perdona, es que por bien que una becerra o becerro haya peleado en el caballo si está a mitad de la faena de la muleta raja la desecha, buscando mucho la durabilidad, acompañadas de bravura, nobleza y trasmisión, evidentemente esta racha se ha visto truncada por culpa de esta maldita pandemia; sintiéndose afortunado por a ver podido lidiar la temporada pasada cuatro erales en una novillada sin picadores en la plaza de toros de Vinaroz, de los cuales tras ser lidiados salió satisfecho, pero con matices, ya que opina que un ganadero no se tiene que dar coba y debe de ser muy exigente. 

 



Por todos es sabido que los ganaderos, debido a la terrible pandemia que está azotando nuestro país, estos lo están pasando muy mal y en esta ganadería no son una excepción, por lo que han tenido que ir tomando medidas para ir capeando el temporal, en primer lugar llevo al matadero unas cuantas vacas viejas y en segundo lugar quemo en la placita de tientas trece machos, de esta forma fueron unas cuantas bocas menos las que tuvo que alimentar. Para esta temporada la incertidumbre es obvia, por lo que es toda una incógnita lo que ocurrirá con esta, eso sí está preparando en los diferentes cercados dos novilladas picadas, cuatro o cinco sin picadores y tres o cuatro toros destinados para las calles, esperemos que se puedan lidiar. 

 



Un tema que no quise dejar en el tintero y del cual se está hablando mucho, es el interés que ha tenido la Unión de Criadores de Toros de Lidia, por integran a todas las asociaciones ganaderas de bravo, y los cuales hace unos meses, hicieron un comunicado disintiendo de la idea, ya que dijeron que no recibieron respuesta por parte de ninguna asociación de bravo; al respecto el ganadero fue tajante: “una cosa es lo que se cuenta y otra bien distinta es la realidad”, pensando y bajo mi punto de vista muy acertadamente; que dejasen de mirarse el ombligo muchas de las personas que forman parte del actual sistema de la tauromaquia, y no unirse solo los ganaderos, sino todas aquellas personas que forman parte del engranaje actual de la tauromaquia, como son toreros, novilleros, apoderados, empresarios etc.. y formar entre todos un frente común, para el bien de nuestra Fiesta Nacional. 

 



 Para finalizar el reportaje el ganadero quiso dar un mensaje de aliento a la afición ya que cree que el mal sueño que estamos pasando pasara, ojala lo antes posible y que hagamos auto critica entre todos, para de esta forma poner al mundo del toro en el lugar que se merece, anteponiendo los intereses del sector a los personales y recordar que hay muchísima gente de ama al toro y que el como profesional del sector no quiere fallar a los aficionados.

 







 

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