miércoles, marzo 30, 2016

Sobre la corrida de Albaserrada de Aignan







Brava y encastada la corrida de de Albaserrada de Aignan. Un toro, "Esclavo", premiado con la vuelta al ruedo. Frente a ella el valor y el corage de César Valencia, Alberto Lamelas volvió a demostrar por qué es un torero demandado por la buena afición de suroeste francés y Sánchez Vara puso de manifiesto su oficio.
Nota: Mientras, por estos lares la gente sigue riendo las gracias de Morante y escribiendo lineas sobre una corrida de Garcigrande que Andrés Amorós calificó de "Floja, mansa y deslucida". Así estamos

martes, marzo 29, 2016

Un fantástico toro de Pedraza, gran triunfo de Joubert en Arles (Crónica de Barquerito)

Un fantástico toro de Pedraza, gran triunfo de Joubert
Corrida de gran porte y brava de los hermanos Uranga, con un quinto excepcional. Reaparición feliz y afortunada del joven torero arlesiano tras dos años en el olvido
Arles. 5ª de Pascuas. 5.000 almas. Nubes y claros, templado. Dos horas y cincuenta y cinco minutos de función.
Seis toros de Pedraza de Yeltes (Hermanos Uranga). Vuelta al ruedo en el arrastre para el quinto, Dudanada, número 20.
Manuel Escribano, saludos y palmas tras un aviso. Thomas Joubert, aplausos y dos orejas. Juan del Álamo, una oreja tras dos avisos y silencio tras dos avisos.
Buenos puyazos de José Manuel Quinta, Óscar Bernal, Mathias Forestier y Paco María.
UN TORO SOBERBIO de Pedraza de Yeltes. Hermosísima prenda de 600 kilos. Colorado, ancha popa, armoniosas proporciones, la cuerna en corona, muy finas las puntas. Un galope sueltecito de partida. Hasta fijarse en el platillo mismo y enfilar desde ahí uno de los caballos de pica de Alain Bonijol. En el Anfiteatro solo sale un picador. Un primer puyazo memorable por la manera de meter los riñones y encajarse. Un segundo en ataque de largo y la misma entrega en el peto. Un quite de Juan del Álamo por tafalleras, dos, y la verónica vuelta de Jesús Córdoba. Réplica valerosa de Thomas Joubert por saltilleras. Galope bravo en banderillas y dos pares excelentes de Raphael Viotti. Y un brindis parsimoniosísimo al público de Joubert.
El primero de lote, encastado, guerrero, noble pero no siempre metido en el engaño, había sido el de su más que decorosa reaparición en Arles, su plaza y su patria. Este otro vino a ser algo así como el toro de su vida. Apuesta mayor: por la categoría del toro, que había empezado a ver y paladear casi todo el mundo en varas y después de varas, y porque, después de dos y casi tres temporadas apartado del toreo, el joven Joubert estaba obligado por la ley del ser o no ser. Fue que sí.
Una faena de larga y original trama, abierta con una inesperada pedresina, que fue como un cohete, y, empalmados con el cohete y el cartucho, el cambiado por la espalda, un excelso natural a pies juntos y dos de pecho amplios, largos, precioso el dibujo. Firme y encajado el torero, planta juncal, verticalidad natural, sueltos los brazos. Un clamor en la plaza. Una segunda tanda más en clásico: el molinete de entrada, cuatro en redondo y el cambiado por alto. Vino planeando el toro a la velocidad perfecta. Templada muleta. Un paseíto enojoso de Joubert entonces. Para tomar aire, para dejarse querer, para pensar, para creérselo del todo.
Y vuelta al toro. Tercera tanda: una arrucina de apertura, tres en redondo, un cambio de mano, el de pecho. Como a resorte el toro en todos los viajes. Todos de aliento, prontos, largos. Una ligera duda de Joubert al echarse la muleta a la izquierda. El pase de las flores ligado con el de pecho. Solución de la tauromaquia de Nimeño II tras su primer viaje a México. Y una segunda cumbre de la faena: al natural de frente sin prueba previa, dos naturales. Y un farol, que no salió, pero lo ligó Joubert con tres más seguidos, y el de pecho. Ya estaba toreando sin espada.
El toro estaba para lo que fuera preciso. Habría admitido hasta veinte viajes más. Incansable el fondo. Sin saberse, el tono de la faena había perdido intensidad. Los adornos a pies juntos se celebraron. No tanto como el toreo de mano baja. Pero hervía el público. De toda la ola de émulos de Juan Bautista –unos cuantos matadores arlesianos de alternativa- tal vez Joubert sea el de mayor sensibilidad. Media estocada. Parecía que sin muerte, pero en el último ataque el propio toro se tragó la espada entera y rodó sin puntilla. Clamor monumental. La vuelta al ruedo al toro. Las orejas para Joubert, que, cuando las tuvo en la mano, se fue a buscar al callejón a Paquito Leal, su maestro y mentor, torero ya retirado, patriarca de los Leal de Arles, lo hizo salir al ruedo, le entregó las orejas y lo abrazó con fuerza. Como hacen los náufragos al sentirse rescatados.
Con todos sus atributos y su volumen, la de Pedraza fue una señora corrida de toros. No se esperaba menos. Los seis fueron bravos en el caballo, nota sobresaliente de la corrida sin excepción. Al sexto, que pareció querer blandearse, le puso las tuercas en varas Paco María. Los seis fueron de largo. El sexto, que por hechuras desdecía de los demás, fue el garbanzote negro: ni un viaje regalado, no descolgó ni una baza. Juan del Álamo, poderoso y entonado con el tercero de corrida, se empeñó en recibir a ese sexto con la espada y no hubo modo.
El primero, cinqueño, de una hondura extraordinaria, fue toro noble pero escarbador, algo tardo y de los de sujetar porque quiso irse varias veces. Tenía, sin embargo, una golosa embestida humillada. Se extendió más de la cuenta Escribano en faena marinera. El propio Escribano quiso lucir al cuarto en el caballo como si se tratara de corrida concurso. No terminó de funcionar el invento, y no por culpa del toro, que fue en varas tan bravo como el que más, sino por otra razones. Demasiado sangrado en tres puyazos, el toro pecó de pegajoso en el último tercio. No pasó apenas nada. Si el toro quinto llega a jugarse de segundo y viceversa, es probable que Joubert se hubiera entonado más. Los toros bravos dan alas y parecen tenerlas.



Fotos: Isabelle Dupin para Apalusos


lunes, marzo 28, 2016

Sobre la corrida de Pedraza de Yeltes en Arles ( I )


Corrida de gran porte y brava de los hermanos Uranga, con un quinto excepcional.
Buenos puyazos de José Manuel Quinta, Óscar Bernal, Mathias Forestier y Paco María.
Con todos sus atributos y su volumen, la de Pedraza fue una señora corrida de toros. No se esperaba menos. Los seis fueron bravos en el caballo, nota sobresaliente de la corrida sin excepción.

Barquerito
(mañana subiremos la crónica completa )
Foto vía Aplausos

domingo, marzo 27, 2016

Escribe Juansintierra

Es tal el despiste, tal la desorientación y hasta la inanidad de pensamiento que a estas alturas de la pelea o confrontación, los taurinos siguen sin entender que o se da una respuesta ética, de máxima exigencia, o no ha adaptación al "tono" que consiga frenar la actual situación. Mientras en cabecera de la manifestación figuren personajes que han hecho del abuso, del ventajismo y la manipulación de públicos legos, el eje de sus "carreras", la batalla está perdida. A mi modesta opinión, todo lo que no sea huir del "marketing barato y zafio" y de las componendas, para abrazar el romanticismo, la épica y la ética es darle bazas al enemigo.
JUANSINTIERRA

viernes, marzo 25, 2016

Sebastián Castillo anunciado en Ceret


Le novillero Sebastián Castillo, qui a quitté le Venezuela pour tenter sa chance en Europe, aura l'opportunité de revêtir l'habit de lumières le 17 juillet prochain à Céret. Il sera accompagné du colombien Guillermo Valencia, et d'Abel Robles, d'Olot, pour affronter la novillada de Vinhas. Sebastián Castillo est sorti de l'ombre cette année grâce à des passages remarqués lors des fêtes populaires de Ciudad Rodrigo.

Florent Moreau

miércoles, marzo 23, 2016

Prieto de la Cal: Primavera en "La Ruiza"

Este pequeño reportaje sirve también para homenajear a esta ganadería, la cual lidió en 2015 una de sus mejores camadas, consiguiendo un total de siete vueltas al ruedo. Creo que eso hay que cantarlo a los cuatro vientos, cosa que no han hecho algunos (que son mayoría). Por desgracia, éstos sólo cantan los triunfos de alguna que otra ganadería y de las denominadas figuras. Vamos, lo del llamado circuito taurino actual. 
José Porcar - Aquí podéis ver el reportaje publicado en Pureza y emoción-

martes, marzo 22, 2016

El animalismo antitaurino…y las inquietantes obras de Patricia Piccini(Jean Palette-Cazajus)


El pasado Jueves día 17, me tocó cerrar la temporada 2016 del Aula de Tauromaquia de la Universidad CEU San Pablo. Titulé mi parlamento: “Desconstruir el Animalismo Antitaurino”. Intenté apoyar mi argumentario en la teoría evolutiva, la genética, las neurociencias, la paleoantropología, la etnología, la historia hasta una conclusión que pretendía ser filosófica.
Resumiré lo dicho en dos conceptos básicos y una conclusión:
1. Es la conciencia de la muerte la que definió y construyó la singularidad evolutiva humana. Esta conciencia es ausente de cualquier otra forma de vida animal. Ejemplifiqué mis afirmaciones a través del análisis genético y cognitivo del animal considerado más próximo al Hombre, el chimpancé. Argumentación a fortiori válida aplicada al toro de lidia, resultado de un tipo evolutivo infinitamente más burdo.
2. Pero mostré que histórica y etnológicamente el sacrificio de los animales siempre ha planteado problemas ontológicos al Ser Humano. El aficionado inteligente es pues una persona que debe situarse en el filo de la navaja de una dura elección.
3. La violencia y las tendencias homicidas, lo vemos todos los días, arraigan en la singularidad evolutiva humana. La Tauromaquia, reglamentada, ritualizada, hace de la muerte del toro una función social reconciliadora.
(...)
La tendencia humana en antropomorfizar, contra viento y marea, los animales persiste en nuestras viejas neuronas. El tiempo de la Historia y de la Cultura cambia mucho más rápidamente que el tiempo de la Evolución a cargo de nuestros circuitos neuronales.
Nada más inquietante y turbador que las obras de la escultora australiana Patricia Piccinini para ilustrar la persistencia de esta desastrosa ambigüedad.
Jean Palette-Cazajus

lunes, marzo 21, 2016

Sobre la tarde de Domingo de Ramos en Las Ventas


 una corrida, de Gavira, con cierta desigualdad, pero bien hecha, muy seria, imponente por delante y por detrás. Toros rematados de los cuartos traseros, que no es baladí. (...) Todos ellos mansos en varas, salían rebotados de la suerte y se marchaban de espantada al caballo de la querencia. De los que desorganizan la lidia y hay que banderillear en los terrenos de toriles. Corren tiempos demansinobles, el bravo se cotiza caro. 
David Galván no me convenció. Vino con la faena hecha desde casa. El mismo quite por chicuelinas en dos toros, perdiendo los trastos al rematar; el comienzo con el pase cambiado por la espalda con un toro que hasta el momento había sido incierto, resultando cogido en la pantorrilla derecha, de la que se veía perfectamente cómo le corría la sangre por la media. Cuando mejor estaba toreando, al natural,(1)se puso a dar circulares, continuando con las manoletinas, como si estuviera en Cantalapiedra de Arriba. Dejó una estocada trasera pasando como un rayo, cortando una oreja ampliamente solicitada. No pudo salir de la enfermería y ahí quedó la historia. 
Muy generoso el público con la primera oreja que le pidieron a Curro. La faena estuvo repleta de muletazos soberbios, de enjundia, pero todos ellos en lo accesorio. Los de pecho, las trincheras y los derechazos de perfil, ligados sin solución de continuidad, acompañando y componiendo figura torera. Mucha guarnición y poca carne. Mató de media en el hoyo y dos descabellos. 
  Otra cosa fue lo del cuarto. Transcurría el trasteo por los mismos derroteros de los chispazos, los remates excelsos, cuando se echó la muleta a la mano izquierda y ligó dos tandas entre las astas del bicho, mandando en la arrancada, pasándoselo por la femoral. Sensacional. Arreciaron los olés más graves. Curro miraba con complicidad a los aficionados que se encontraba en el siete, ahora sí. Se volcó en el morrillo del toro, la estocada fue de las que valen una oreja por sí sola. No dejó escapar la oportunidad y suma su segunda Puerta Grande en Madrid. Enhorabuena. 


(1) los naturales de Galván fueron francamente buenos...que se pusiese a dar circulares y manoletinas tras esos muletazos nos resultó imcomprensible. 
Fotos: Juan Pelegrín y Álvaro Marcos ( @alvaromarcos75 )


sábado, marzo 19, 2016

¡¡No seas cursi!!


También tuve yo en un tiempo mis pujos de filósofo, filántropo y redentorista, que me inclinaron a abominar de toros y de toreros; pero Dios me habló al alma gritándome: ¡¡No seas cursi¡¡ y volví al buen camino, es decir, a la plaza, donde al par que me encanto con las maravillas del arte de los Romeros y Cándidos, me río hasta desternillarme de filósofos hueros y filántropos sensibles. 

José Velarde - Toros y chimborazos:  cartas dirigidas al Sr. José Navarrete impugnador de las corridas de toros (1886)"

viernes, marzo 18, 2016

Jean Palette Cazajus


Ayer nos habló de historia de las religiones, genética, animalismo, neurociencia, paleontología, filosofía, antropología, etnología...y , por supuesto, tauromaquia.
Aún quedan personas que se hacen preguntas y buscan las respuestas; personas que nos plantean preguntas para que busquemos respuestas. En definitiva, aún hay personas que piensan.
No todo está perdido

jueves, marzo 17, 2016

Dos artículos de prensa

Se supone que a un aficionado a los toros -es mi caso- debería haberle confortado la manifestación de ayer en Valencia. Un "Basta ya" multitudinario que reflejaba el orgullo de una minoría acosada. El problema es que la yuxtaposición de orgullo y minoría acosada refleja en sí misma la precariedad de la tauromaquia, su desubicación en la sociedad, la insólita degradación de símbolo cultural a fenómeno amenazado.
Rubén Amón - El día del orgullo olé - 


No está lejano el tiempo en que penalizará socialmente dejarse ver en la misma feria taurina a la que antes se iba, no tanto por afición verdadera, sino por salir en las negritas de las crónicas mundanas. En lo que concierne a Madrid, supongo que ello supondrá la extinción, o al menos la mengua, del público de clavel. Modelos, actores, marquesitos Brummell y cantantes melódicos que no querrán ser pasados por la quilla por el piquete animalista (...)
A lo mejor resulta que, entonces, culminada esta decantación, en la plaza sólo quedarán aficionados verdaderos, imposibles de engañar con retóricas, fanfarrias, ternas rosas y trucos, que, además de unidos en la clandestinidad, se sentirán un final de especie, los últimos depositarios de una tradición que declina. 
(...)
La manifestación taurina de este fin de semana en Valencia me pareció impresionante. Más allá del aspecto de los matadores en la primera fila, que parecían subjefes carismáticos de la Camorra, con sus gafas ahumadas y la galanura bizarra que en Nápoles definía a los «guappi» de la vida criminal. 


David Gistau - Los últimos -

miércoles, marzo 16, 2016

Ya a la venta el último número de Tierras Taurinas


En este número André viaja por la Sierra Norte de Sevilla y visita varias  ganaderías entre las que se encuentran La Quinta, Espartaco, Virgen María o Saltillo.
Al inicio de la revista aparecen una serie de artículos sobre el Jallikatu en la India que no han dejado de sorprenderme y que me ha llevado a subir la foto que ilustra este post. 
Un lujo para el aficionado. Disfrútenla.
- aquí se puede ojear este número -

Nota: La exposición Tauromaquias Universales ya está en la Universidad Católica de Valencia.

lunes, marzo 14, 2016

Sobre la corrida de Adolfo en Valencia


  Cinco hermosos toros por delante –tres de ellos, cinqueños- con abundante artillería, en tipo los cinco, cárdenos, cortos de manos. Soberbio escaparate. Solo desentonó el sexto y último, que pasó la barrera de los 600 kilos.
(...)
 La nota relevante de la corrida de Adolfo fue la emoción, Solo que el primero de los seis, cornipaso y vuelto, el clásico saltillo degollado, salió quebrado de varas y se resolvió en una embestida suave pero claudicante.
(...)
Cuatro de los seis toros eran de la misma reata y los cuatro llevaban el mismo nombre, Aviador, estirpe fiable en la ganadería. El tercero, un Tostadito de reata probablemente de prueba, y el cuarto, un Madroño de reata infalible, se salieron del registro. Fueron los dos toros de mayores emociones: el tercero, porque al rematar arriba el muletazo se revolvía, y el cuarto, por hacer esas cosas tan singulares del encaste que son ir mudando de condición a lo largo de la lidia y de hacer las mutaciones para bien o mejor.
Barquerito

Paco Ureña se rompió de toreo. Más puro imposible. Y la entrega, absoluta. Como si quisiera explicar la esencia de todo aquello que había movilizado a 30.000 personas. La verdad de la relación entre el toro y el hombre. Ofreciendo el pecho, ensimismado en sí. Eh, toro. Y rompía por abajo el muletazo enroscado a la cadera. El Adolfo ahí. Una serie de temple rebosante sobre el filo por la derecha. Y de repente un gañafón, una paliza, un pitonazo tan feo que le arranca el corbatín (...). 
 Pero se levantaba Ureña, más sincero aún, le robaba otra serie y de un espadazo lo tumbaba. Caía una oreja fuerte y tras saborearla pasaba a la enfermería.
Rafaelillo le pegaba un zapatazo a la tarde. Salía 'Madroño' y lo recogía con rodilla en tierra por verónicas auténticas. Sinceridad y una media para que estallara la ovación del coso de Valencia, que desde hace un tiempo acogió a Rafael Rubio e iluminó su torera madurez. No rompe el toro tal cual. Va el esfuerzo. Rafaelillo apuesta. La emoción preside aquello. Por la mano diestra, muy abajo. El murciano se crece, le traga, va calando y el pitón izquierdo, resguardado para el final. De repente sucede al natural. Una cuarta de muleta abajo, que extrae el brillo a la embestida y 'Madroño' que se resbala hasta allá. Hay fondo y toreo clásico. Una cuarta, abajo, enganchado y atrás. Otro impacto. La faena se multiplica en su final, el espadazo y una oreja

De Escribano destacar su actuación con el capote.

Entre los de plata destaco la brega de Pepe Mora

Nota: Mucha gente en la manifestación , muchos aficionados de base, sobre todo aficionados a los festejos populares. El mundo del toro en la calle. Como escribe antonio Lorca  "La fiesta de los toros desaparecerá —si así tiene que ser— el día que el público, cansado de aburrimiento, abandone definitivamente las plazas. Mientras tanto, debe ser defendida como lo que es, una tradición en la que millones de ciudadanos, gente que hace cada día este país, de extracción, ocupaciones e ideologías diversas, esperan encontrar un chispazo de felicidad.
Por todo ello, qué bien que el toreo haya saltado al ruedo. Nunca es tarde, ya era hora, por fin…"
Eso si, al frente de la manifestación , junto a la pancarta, se veía a muchos de los culpables de la situación en la que nos encontramos, "figuras" que huyen del toro con trapío , casta y poder como de la peste; representantes de deesos empresarios que todos conocemos...
 Foto: Javier Comos y Arjona



viernes, marzo 11, 2016

Picasso en el ruedo

-“Toros en todas partes. Es Picasso en la corrida, como el nadador en el mar. Cada vez que se celebra una, él va. A cien, doscientos o cuatrocientos kilómetros. La corrida es una corriente de verano que arrebata, inexorable y maravillosamente, el destino de los domingos; es la fiesta, la sangre que late cuando sale el sol, de buen o mal humor, poco importa; es día de corrida”

-.Hele ya de vuelta de los toros, triste como la noche … Se acabó … Afortunadamente, ya no hay más corridas. ¡Basta de corridas! … El día siguiente por la tarde, los periódicos anuncian una nueva corrida no sé dónde. ¿Dónde vas, Picasso? Voy a los toros … Nada más escribir estas palabras, me encuentro de nuevo en la plaza, con todo el sol de Cézanne y toda la corrida de Picasso, la muchedumbre terrible pero magnífica, o las dos cosas, la señora que teme que el toro no sea noble, el miedo, los gritos, la suerte de matar”...
Hélène Parmelin, en “Picasso en el ruedo” (Plaza y Janés, 1961)

Vía: Joaquín Albaicín

Domingo Valderrama con un toro de Cebada


Vía: J.R.M.

jueves, marzo 10, 2016

Sobre el mantra de los taurinos sobre las exigencias del toro mastodonte por parte de la afición y parte de la prensa

- El año pasado, por San Isidro, sacaron unos toros que pesaban arriba de los 600 kilos, y la gente esperaba expectante su aparición. Una vez en el redondel, sin embargo, se sentía decepcionada. Y ya se levantaban los aficionados señalando con el dedo el producto cárnico, para denunciar solemnemente: «¡Eso no tiene trapío, señores!». (Joaquín Vidal)
-Saltaban a la arena los novillos de Sanchez-Arjona y algunos eran diminutos, mientras otros no levantaban cuatro palmas del suelo, vamos, al decir. Pero sacaron casta brava y, además tenían trapío.
 (Joaquín Vidal)

 "Dice El Juli que hay que ser autocríticos con eso de la desaparición de encastes y seguidamente arremete sin contemplaciones contra el público y la prensa que ha demandando el toro mastodonte. ¡Menuda autocrítica! 
La teoría de la exigencia de un sector de la plaza de Madrid, una minoría ruidosa, y la crítica implacable de la que Joaquín Vidal (qepd) es cabeza visible, está muy pasada de moda, caduca, y resulta bastante rancia y demagoga."
Dominguillos - les enlazo a su post "Las contradicciones de El Juli-"

miércoles, marzo 09, 2016

Trapío

El peso no es marcador de trapío. Estamos hartos de que se achaque al aficionado torista una pretendida demanda de kilos sin sentido, para lo que los ganaderos tendrían que cebar y acochinar en exceso los toros. Y estamos, igualmente cansados, de ver reses anovilladas en corridas formales con más de 550 kilos, e incluso con más de 600. Por el contrario, se han lidiado reses, en las plazas más toristas, como Madrid, con los 500 kilos justos y aun con menos, que merecieron el aplauso y la admiración del concurso
Rafael Cabrera
Foto: "Isleño" un Tulio lidiado en Madrid en agosto del 2003 con 464 kg.

Novillo de Isaías y Tulio Vázquez 1952

Vía: Iván Colomer

martes, marzo 08, 2016

Juanita Cruz

La torera madrileña Juanita Cruz vio como durante los años 30 los distintos gobiernos impidieron que pudiera ejercer su profesión elegida. Con la Constitución española de la República tuvo un periodo en el que sí pudo actuar pero la guerra civil truncó su carrera. Después de la victoria de los golpistas ya nunca más la dejaron torear en España. De ahí un epitafio como el que eligió para su tumba que se encuentra en el cementerio de La Almudena.
O.Martinez
Nota: Copio el epitafio que se puede leer en la foto:
"A pesar del daño que me hicieron en mi patria los responsables de la mediocridad del toreo de 1940-50...¡brindo por España!"

lunes, marzo 07, 2016

La raza Domecqñada

Esto de los toros, triste e irremediablemente, cada vez es más matemático. Y digo que tristemente porque lo matemático, sin ambages, es consecuentemente previsible; lo previsible cae en lo monótono; y la monotonía en el aburrimiento.
(...)
¿Y qué es hoy lo matemático? Lo matemático es encontrarse con ferias como la de Castellón, cerradas a base de figuras hechas y toros adiestrados; lo matemático es cortar orejas al mínimo bicho que se sostenga y le metamos dos trapazos con temple, o sea, aguantando su aborregada embestida de animal medio tullido; 
(...)
Pero para que estas nuevas reglas sean posibles, lo primero es modelar una generosa materia prima. Hay que domeñar al toro; mejor adomecqñarlo. El principio es muy simple: el animal lábil, debe transmutar en pastueño; lo primero es una característica específica del biotipo toro, y la segunda -tan ensalzada- es característica artificiosa agregada por el hombre. El tantas veces mentado monoencaste no es más que eso: la preponderancia del tipo de encaste más proclive a cumplir este principio. La procedencia de lo domecq y todas sus variantes son el fruto de un meditado trabajo ganadero. Y un ejemplo más es esta Magdalena 2016; o la corrida de hoy, de Zalduendo. Feria y corrida eran previsibles, y de ahí que el aburrimiento haga presencia. Certeza matemática.

Antonio Mechó en Pureza y emoción -Aquí el artículo completo-

Nota: precisamente en la última Tertulia del Jordán, Juan Pedro Domecq nos hablo de la imprevisibilidad. Escribe Andrés de Miguel en el resumen de dicha tertuliaAportó (J.P. Domecq) un concepto poco usual y muy interesante, la imprevisibilidad, que considera necesaria para que los toreros puedan demostrar su capacidad de lidiar, lo que mejora el espectáculo. Parladé sería ese ejemplo, pero cuya consecuencia es que las figuras sean renuentes a anunciarse con este hierro.

Foto: Perera con un Cuvillo en Almería - Foto: Asociación Toreo en Red Hondo

Suerte de varas


Vía: Margé Béatrice

miércoles, marzo 02, 2016

Este es el nivel


Librería Argot de Castellón

Sobre la escuela taurina Marcial Lalanda

-fue el Ayuntamiento de Tierno Galván quien lo salvó,(el proyecto de la escuela taurina): “En aquel gobierno estaban socialistas y comunistas. Decidieron hacerse cargo de la escuela. Menos de cuarenta años después, la nueva izquierda va a cargársela”, dice con nostalgia Ramón
-Unos sueños que no son sencillos. Ni tampoco comprendidos por su entorno. "Sacar el tema de que asisto a clases de toreo en mi colegio es complicado. Para mis compañeros es inmoral", dice Rubén. "Hubo un profesor que me llegó a llamar sádico", añade Daniel.
-Cristina Cifuentes echó un capote a la Marcial Lalanda. Al no poder salvarla, ha decidido crear otra escuela a la que puedan trasladarse los profesores y alumnos. Será gestionada desde el Centro de Asuntos Taurinos y, de momento, no se ampliará su presupuesto. Tendrá como sede Las Ventas. Manuel Ángel Fernández, director del Centro, lamenta el cierre de la vieja escuela: “El Ayuntamiento la está matando por inanición. Ojalá no hubiéramos tenido que hacer esto. La idea es de continuidad absoluta. Intentaremos que sigan tanto los profesores como la dirección”.“Aquí no van a estar mal -continúa Fernández- pero es que el Batán es idílico. ¡Se construyó para eso! Ya han llamado familias para preguntar cuándo empezamos. Calculo que podríamos estar funcionando a mediados de abril”.

Aquí el artículo completo de Daniel Ramírez publicado en El Español
Fotos: Samuel  de Román



Gabin Rehabi y un toro de Dolores aguirre, "Cantinillo" en Vic-Fezensac