Copio de la página de la editorial Ediciones Turpial:
El debate en el Parlamento de Cataluña sobre la abolición de las corridas de toros en esa comunidad ha vuelto a poner de actualidad una vieja polémica: ¿Es un espectáculo cruel y brutal, residuo de lo peor de nuestro pasado? ¿O una manifestación artística de pura raigambre española? El núcleo de la discusión es sin duda de carácter ético. Quienes piden que se prohíba la fiesta taurina no lo hacen por razones estéticas ni dudan de que sea tradicional sino que cuestionan su moralidad. A fin de cuentas, se trata de una cuestión filosófica, no folklórica o sentimental. En ella se centra este libro.
No es un alegato a favor de las corridas de toros, sino contra las argumentaciones moralistas de quienes quieren suprimirlas. Sobre todo, es una reflexión sobre nuestras relaciones con los animales y la diferencia esencial entre los miramientos que debemos tener con ellos y las obligaciones éticas que tenemos con los humanos.
El debate en el Parlamento de Cataluña sobre la abolición de las corridas de toros en esa comunidad ha vuelto a poner de actualidad una vieja polémica: ¿Es un espectáculo cruel y brutal, residuo de lo peor de nuestro pasado? ¿O una manifestación artística de pura raigambre española? El núcleo de la discusión es sin duda de carácter ético. Quienes piden que se prohíba la fiesta taurina no lo hacen por razones estéticas ni dudan de que sea tradicional sino que cuestionan su moralidad. A fin de cuentas, se trata de una cuestión filosófica, no folklórica o sentimental. En ella se centra este libro.
No es un alegato a favor de las corridas de toros, sino contra las argumentaciones moralistas de quienes quieren suprimirlas. Sobre todo, es una reflexión sobre nuestras relaciones con los animales y la diferencia esencial entre los miramientos que debemos tener con ellos y las obligaciones éticas que tenemos con los humanos.
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Ha estado muy bien la presentación del libro. Ya os copiaré algunos pasajes que me han gustado. Creo que es un buen complemento al de Francis Wolff.
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