martes, febrero 07, 2012

Tras la muerte de Antoni Tàpies


Copio unas lineas de una reflexión de Pere Gimferrer publicada en el 2010 en ABC:
Me avergonzaría pertenecer a dicha colectividad si no recordara que a ella pertenecía también Joan Miró, que, al proyectar en Montecarlo su ballet Jeux d´enfants, escribía que su deseo era obtener un resultado comparable a una corrida de toros. No me siento a solas con Miró: en el ámbito de quienes hablan o hablaron catalán, le acompañan Fortuny, Casas, Picasso, Dalí, Tàpies (libro Del Toreo, de Bergamín y Coderch, 1977), Barceló, entre los pintores; en otros ámbitos lingüísticos Cocteau, Orson Welles, Hemingway, Montherlant, García Lorca, Alberti, Miguel Hernández, Vicente Aleixandre, Goya; entre los escritores en lengua catalana, Sagarra o Espriu. ¿No basta con eso?(...). La prohibición de los toros sería simétrica a la prohibición de Viridiana. No deseemos vivirla.

2 comentarios:

  1. Para el verdadero arte no existen nacionalidades, a los artistas nos une una fuerza mayor imposible de describir...por medio de nuestra obra expresamos esa unión ...y cada obra lleva su propio estilo, su propio colorido, su propio sonido...y si, su propia faena.

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  2. Tàpies fue uno de los personajes que enviaron cartas al parlamento catalán pidiendo el voto a favor de la prohibición. Buscad por internet y veréis...

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