Crónicas desde Guadalajara

Fue un fraude (La Afición)
Un salinete llamado "desvergüenza... (El Informador)

Copio de las crónicas de La Afición:

Y es que Tomás y su gente exigieron para su actuación en Guadalajara toros que distaban mucho de la categoría de la plaza. Se supo por fuentes fidedignas que en su contrato se establecieron a detalle los toros del encierro de Bernaldo de Quiroz, animales de tan escasa presencia que no fueron aprobados por las autoridades de plaza. Sin embargo, la presión de la gente del madrileño continúo y esto resultó en un encierro de varias ganaderías con una presencia no apta para la Nuevo Progreso. Es como si en sus mejores tiempos, Mike Tyson exigiera pelear ante la Chiquita González.

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Cierto, los toros no tienen palabra de honor, pero por lo vistio tampoco la tienen los miembros del entorno de José Tomás, quienes al fin y al cabo fueron los que escogieron la corrida de Bernaldo de Quiroz. Repito, no fui al sorteo ni al enchiqueramiento, pero, imagínese usted, de los cuatro que salieron de Bernaldo de Quiroz, dos fueron sonoramente pitados y rechazados con tal fuerza por la afición, que el juez de plaza no tuvo mas remedio que regresarlos al corral ¡por chicos! ¿Cómo estarían entonces los otros cuatro que fueron rechazados en los corrales?, ¿Quiere usted otra razón para culpar a la gente de José Tomás de lo que pasó? ¡Qué casualidad que los dos toros más chicos le hayan tocado a José Tomás en el sorteo! Yo me pregunto, ¿hubo sorteo?

Foto: Laura Resendiz