martes, junio 10, 2014
Alberto Lamelas ante "Cantinillo", de Dolores Aguirre, en Vic-Fezensac (André Viard)
Frente a semejante prenda, que hizo pasar las de Caín a su cuadrilla, para dejar los palos de uno en uno a la carrera, Lamelas optó por la vía del valor a secas. Cada muletazo olía a cornada, y cada vez que el toro lo echaba de la suerte, Lamelas volvía. Faena de toma y daca a un toro que no perdonaba una, sin poder asentar nunca los pies está claro, pero volviendo a la carga después de cada tarascada descompuesta de su enemigo. Una faena de tiempos añejos, con una presidencia demasiada moderna para poder entender que la heroicidad es un valor que se debe de premiar con dos orejas de tanto peso como las que se regalan por esportones en decenas de corridas insignificantes a lo largo de la temporada. Mal por el presidente pues, despreció la voluntad del pueblo que pedía para Lamelas una salida en volandas con las orejas en la mano, y peor por haberse pasado de soberbia para aguantar de pie la bronca que muy justamente se le dedicó.
Fotos y texto de André Viard
Nota: Aquí la crónica completa del festejo.
Nota: Aquí el vídeo de la faena. Vía Feria TV
Gracias por poder ver el video. !!!! Un espectáculo grandioso!!!!!! donde el TORO no da pena, da miedo, he impone la que es. Y tengo ganas de ver a este TORERO.
ResponderEliminarKaparra
Excelente! Como venido de un pasado ya casi olvidado por esa modernidad incomprensible para pocos y del gusto de muchos...
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