miércoles, abril 23, 2014
Sobre los conceptos de "casta", "bravura" y "nobleza" (Fernando Cuadri)
-Para mi la casta es el afán de lucha del toro en la que pone todos sus sentidos y puede ganarla empleándose, acometiendo y embistiendo que es lo que se entendería como bravura o medio defendiéndose que es el mal son.
Fernando remacha su idea
-La bravura es manifestar su afán de lucha embistiendo, acomentiendo y entregándose. Nobleza es obediencia y viene después, surge cuando el torero les hace las cosas bien.
Fernando Cuadri en Aplausos ( Nº1907 del 14/04/2014)
- La nobleza como tal no existe a la hora de definir un toro bravo. Un toro noble que no sepa hacer otra cosa es al final un toro tonto. (Fernando Cuadri a Iñigo crespo en Aplausos en enero 2013)
Foto: "Tratante" de Cuadri, mejor toro de la Feria de Sevilla de 1965.
Releo mi comentario anterior algo apresurado (problema de los móviles) y debo corregir lo dicho en lo referente a la semejanza entre bravura y casta. En efecto, si se distingue la casta de la bravura (que sería la casta buena) y, por tanto si tiene coherencia el concepto de manso encastado (la casta mala o defensiva). Sobre la nobleza sin embargo si reitero mi desacuerdo con la definición dada.
ResponderEliminarUn cordial saludo.
José, no nos ha llegado el comentario anterior al que te refieres.
EliminarA esa "casta mala", de manso, yo la llamo genio.
Saludos
Vengan los ganaderos buenos¡¡¡¡
ResponderEliminarJavier.
ResponderEliminarSi. Pienso que la denominación de "genio" para esa forma de comportamiento es una buena aproximación.
Por lo que respecta a mi comentario anterior, traspapelado, señalaba mi desacuerdo con Don Fernando en el sentido de definir la "nobleza" como "obediencia".
En mi opinión, "nobleza" en el toro es lo opuesto a "sentido" que es la capacidad de distinguir el "bulto" del "engaño". Nobleza sería lo contrario y para mí es la cualidad básica que debe tener el toro de lidia: No una cualidad accesoria o secundaria sino primordial pues sin "nobleza" no existiría el toro como hoy lo conocemos. Por eso el toro que no es una fiera sino un animal noble y valiente es el único que se puede torear.
Por el contrario, la "obediencia" creo que tiene que ver más con la "docilidad" o sea, con la sensación de poco peligro que nunca debe dar un toro bravo. Un toro de lidia que se arranca con bravura y fiereza (con "afán de lucha" como dice Cuadri) pero a comerse los engaños, no al torero, es un gran toro. Un toro de lidia fiero y con sentido ("el toro que da miedo" según dicen algunos) es un marrajo traicionero que autoriza al lidiador a utilizar los recursos secularmente admitidos y a deshacerse de él como buenamente pueda (bajonazo en la tabla del cuello y si hace falta tomar el olivo como aconsejaba Pepe-Hillo) pues imposibilita no ya cualquier forma de toreo sino una lidia medianamente razonable (lidiar -en mi opinión- es corregir los defectos del toro e impedir que adquiera los defectos que no tiene y lo de este tipo de toros son incorregibles).
Tampoco estoy de acuerdo con el ganadero en la consideración de que "la nobleza surge cuando el torero hace las cosas bien". Creo que la nobleza es una cualidad innata del toro, que se puede perder por una mala lidia pero no creo que una buena pueda convertir en noble a un toro "de sentido" (aunque puede tapar algo ese defecto a ojos del espectador poco avezado).
Ese aserto más bien parece una manera de justificar el comportamiento de determinados toros: Algo así como si decimos que el toro era bueno pero lo han estropeado a vece de capotazos sin sentido y una lidia inadecuada. Me suena a coartada de ganadero.
Muchas gracias y un abrazo.