La "crítica oficial" se cisca con la de Miura
La «crítica oficial» se cisca en la de Miura, con un par (...) porque van a los toros a ver, literalmente esto: tres verónicas y una media en las que la barbilla del torero se fusiona con su pecho, una tundidera de derechazos con el toro siguiendo la muleta como un perrillo, tres «obligados de pecho», cuatro manoletinas y un sartenazo en los blandos echándose fuera que mata al toro con rapidez: la faena moderna. Por eso los Miura les incomodan, porque ahí hay que mirar, enterarse, ver qué pasa, entender qué ocurre y valorar de acuerdo a eso; porque la emoción de un hombre midiéndose con una fiera les resulta poco grata, y prefieren las monerías, los mohínes, los desplantes de un supuesto artista ante un pobre animal, espectáculo más propio de la Plaza de Chueca que de la Plaza de Toros. Ver a un toro pavoroso, difícil, vendiendo cara su vida a estos les resulta aburrido, sin darse cuenta del aburrimiento extremo que producen sus prescindibles escritos, más o menos mercenarios, de los que nadie ya se fía.
José Ramón Márquez (Aquí el artículo completo)
Me leo el artículo, de acuerdo con ello, pero eso no quita con que cada vez haya menos gente que le gusten los toros... pronto los veremos hasta con fundas en los ruedos, no se vaya a lastimar alguien...
ResponderEliminarel problema es: Miura: un tercio de plaza. Hoy, Cuvillo(ya Zalduendo): plaza llena.
ResponderEliminarPuede gustar, a mi no gusta, pero esta es la realidad. Esto se puede mejorar educando el publico y aprovechando mejor los toros, con los dos primeros tercios que gusten mas, pero esto ultimo lo unico que lo hace es Castaño y solamente con metad de su quadrilla.
Lorenzo desde Italia.